Operación Del Potro

Por Maximiliano Boso

De la Redacción de LA NACION

Juan Martín del Potro se operó la muñeca derecha, según informó ayer el propio jugador en una carta pública enviada al programa "No somos nadie", de la Rock & Pop, conducido por el periodista Juan Pablo Varsky, en la que no ofreció precisiones acerca de los tiempos de recuperación de la dolencia que, en principio, lo mantiene fuera de la competencia desde el Abierto de Australia, a comienzos de año.

Las consultas hechas por La Nacion con otros médicos traumatólogos locales indican que una cirugía de este tipo le demandará, como mínimo, tres meses de recuperación. En el mejor de los casos, Del Potro podría volver a hacer tenis en un mes y medio, pero al circuito, no antes de los tres meses.

Teniendo en cuenta que el Abierto de los Estados Unidos es a fines de agosto próximo, es altamente probable que no pueda defender el título más importante conseguido en su carrera, el año pasado, en Flushing Meadows.

Por lo demás, los plazos de recuperación podrían prolongarse hasta finales de la temporada.

De no jugar hasta después del Abierto de los Estados Unidos, Del Potro, que actualmente ocupa el 5° lugar, perderá 3530 puntos en el ranking, lo que lo hará retroceder hasta cerca del puesto 20°.

La invervención fue en el "tendón cubital del extensor carpiano" de la muñeca derecha, de acuerdo con lo expresado por el tenista. La efectuó en la Mayo Clinic de Rochester, en los Estados Unidos, el doctor Richard Berger, uno de los más importantes especialistas mundiales en mano.

El dado a conocer ayer fue el tercer diagnóstico que recibió Del Potro en las últimas semanas. El propio doctor Berger había determinado hace cuatro semanas, en la primera visita del tandilense a Rochester, que sufría una tendinitis de pronador cuadrado. Y hace menos de dos semanas, el doctor Eduardo Zancolli, uno de los más reconocidos especialistas de nuestro país consultado por Del Potro, estableció que había una ruptura del fibrocartílago triangular.

En lo que también coincidieron las fuentes médicas consultadas por este diario es en que la operación no garantiza que volverá a jugar sin dolores. Eso sólo se apreciará con la evolución.

Todas estas circunstancias contribuyeron a que en estos meses Del Potro sufriera problemas anímicos que fueron confirmados a La Nacion por, al menos, cuatro fuentes vinculadas al tenista, incluyendo su propio cuerpo técnico.

"Tiene una pequeña inflamación en el tendón y él dice que le molesta, pero eso no debería impedirle jugar", había dicho en su momento la fuente más próxima al tenista. Cuando los datos salieron a la luz, el padre del tenista, Daniel, dio la orden de no dar más precisiones sobre el estado de Juan Martín.

Entre la popularidad mundial alcanzada en poco tiempo y las dificultades planteadas por la lesión en la muñeca, el tandilense se saturó. Y empezó a tener problemas en la cancha: cada vez que se aproximaba el tiempo de volver al circuito, reaparecían los dolores.

Incluso, desde el círculo del jugador hubo consultas a terapeutas y especialistas en neurociencias cognitivas.

El de la comunicación es otro problema que a estas alturas enfrenta Del Potro, la única estrella mundial del tenis que no tiene página oficial de Internet, ni cuenta de Facebook o Twitter, por citar otros dos medios de moda en estos tiempos y usados frecuentemente por las otras figuras. Esto es algo por lo que incluso la ATP le manifestó inquietud en forma extraoficial al jugador y su casi hermético entorno. De hecho, nadie imaginaría a Roger Federer, Novak Djokovic, Rafael Nadal o Andy Murray, sus compañeros en el top 5 del ranking mundial, enviando un comunicado sólo a tres medios, tal cual lo hizo ayer Del Potro.