El director de Poliarquía Consultores, Alejandro Catterberg, se refirió a los cruces que tuvieron lugar en las últimas semanas entre referentes del kirchnerismo y el Gobierno y la oposición y la gestión de Alberto Fernández. En ese escenario, dijo que mientras que la sociedad argentina aún no salió de la cuarentena por la pandemia de Covid-19, la política sí lo hizo.
"Los tuits de Agustín Rossi o los carteles en el Conurbano diciendo 'Fuerza Alberto' después de las declaraciones de Hebe de Bonafini dan cuenta de algo intrínseco del Gobierno que tiene que ver con esa génesis en que Cristina eligió a Alberto Fernández como candidato presidencial y a Axel Kicillof como candidato a gobernador de la Provincia. Así se generó una cuestión que no tiene una fácil resolución. Es un gobierno con dos cabezas y no está claro cómo es la toma de decisiones o quién tiene la palabra final", afirmó Catterberg, entrevistado por el secretario general de LA NACION, José del Rio, en el programa "Comunidad de Negocios".
En la misma línea, dijo que Cristina Kirchner tiene una "capacidad de condicionar" al gobierno de Fernández por su a popularidad en cierta parte de la población, más el peso que tiene en el Senado y el fuerte apoyo de organizaciones como La Cámpora.
"Estamos frente a un gobierno de coalición peronista que apoya al presidente, pero este tiene que hacer equilibrio en su relación con la vicepresidenta. Otra cuestión es que veníamos de una etapa de conflictividad anestesiada dentro del Gobierno por la cuarentena y entre las coaliciones por las conferencias de prensa de a tres entre Fernández, Rodríguez Larreta y Kicillof y eso fue desapareciendo. La sociedad argentina no volvió a la normalidad, pero la política, sí", aseguró.
En cuanto la discusión en torno a la democracia en Venezuela y el rol de Sergio Massa, el analista dijo que el fundador del Frente Renovadorl es parte del ajedrez complejo del peronismo hoy en la Argentina. "El peronismo volvió al poder cuando todavía no había curado sus heridas internas. Hubo un aglutinamiento rápido cuando Cristina no se presenta para presidenta y les toca estar juntos en este contexto difícil. Massa cuenta con un numero frágil de mayoría en el Congreso y mantiene su posición y aspiración presidencial. Hay un equilibrio que también tienen que mantener otros actores, además del presidente y la vicepresidenta, entre tensiones internas a medida que la cuarentena da espacio a la crisis económica", describió.
En tanto, consultado acerca de si el kirchnerismo se podría desprender de una eventual mala gestión de Alberto Fernández, dijo que si bien hay ejemplos de quiebres en coaliciones y entre presidentes y vices "van a tener que convivir y encontrar un equilibrio".
"En Cambiemos también había tensiones por desencuentros con el radicalismo y las apariciones de Elisa Carrió que criticaba a ministros de Macri en los medios y mantuvieron esa convivencia. Es verdad que Cristina tiene un poder interno más grande que Carrió, pero hay un paralelismo ahí y tendrán que ir administrando sus tensiones", agregó.
En cuanto al escenario electoral para las legislativas del año próximo, dijo que, en lo formal, si el oficialismo pierde no pierde diputados, aunque el peso de una derrota puede ser simbólico. Sin embargo, dijo que hay varios escenarios posibles: "Las elecciones del año que viene se pueden parecer al voto bronca del 2001 con un 30% de votos en blanco o impugnados; o a las de 2009 en las que, con la crisis internacional, ganó Francisco de Narváez, aunque dos años después el oficialismo fue reelecto. O a las de 2013, en las que el Gobierno perdió y se abrió una expectativa de alternancia de poder. Hay ejemplos muy diversos de lo que podría pasar", contó.
Por último, se refirió al conflicto del gremio de Camioneros con Mercado Libre y dijo que se trata de una empresa con mucho contacto con el argentino común lo que hace que tenga un impacto social más importante que hechos en otras industrias o que involucren a otras empresas.
"Mercado Libre no es una empresa fácil de demonizar porque tiene mucho contacto con la vida de los argentinos sobre todo en el medio de la pandemia. Entonces esta disputa entre un sector tan representativo del sindicalismo como es Hugo Moyano y Camioneros y la compañía tiene un impacto social más importante que otros hechos que pueden ocurrir con otras industrias y empresas", cerró.