El financiamiento de la petrolera, secreto

MAR DEL PLATA.– Además de lucir su logo como sponsor en el 48° Coloquio, YPF mandó un representante a hablar sobre energía. IDEA había apostado a que el orador fuese Miguel Galuccio, CEO de la petrolera estatal, pero la Casa Rosada no le otorgó el placet para pasearse en los pasillos del encuentro. Fernando Giliberti, director de Planeamiento de Desarrollo y Negocios de YPF, fue el encargado de contar cuáles serán los planes de la compañía. Y defraudó. Repasó cifras de la empresa y del mercado, volvió varias veces sobre el ya anunciado Plan Estratégico 2012-2017 y repitió la cifra de 37.000 millones de dólares de inversión en los próximos cinco años. Pero obvió la única pregunta que todos esperaban que respondiera. ¿Cómo se financiará semejante cifra? No lo dijo y no permitió que se le preguntase.

"YPF tendrá 37.000 millones de dólares de inversión bruta en los próximos cinco años. De ese dinero, el 73% se destinará a explotación; el 4%, en exploración, y 22%, en refinación, transporte y comercialización", dijo Giliberti cuando le tocó exponer. A poco de empezar a hablar, reconoció que la dependencia de la Argentina de las importaciones es "incómoda" y que la empresa va a trabajar para revertirla. "Estamos frente a una tremenda oportunidad, porque es real que las importaciones son incómodas para el sistema, para las inversiones y para la compañía. También son un desafío para desarrollar las alternativas que puedan suplantarlas en producción local", agregó.

Desde que Galuccio anunció el plan, a fines de agosto, el sector energético, el empresariado y los economistas se preguntan cómo hará la petrolera para conseguir semejante cantidad de dinero. Pues Giliberti no pudo despejar la duda, ya que no dio opción a preguntarle nada. A diferencia de lo que ocurre con los panelistas del Coloquio, que suelen permanecer después de su exposición, el ejecutivo de YPF salió a pasos casi de corredor. No habló, pese a que los periodistas intentaron hacerle preguntas, y de sopetón se fue en una camioneta que lo esperaba en la puerta del hotel.

Sin el detalle del origen de los dólares que irán a parar a los pozos petroleros, todo lo demás se pareció más a una expresión de deseos que al detalle de un plan estratégico.

"Tenemos un liderazgo importante en el mercado y pensamos no sólo sostenerlo, sino también aumentarlo", dijo el ejecutivo. "Para que las inversiones sean eficientes, debemos asumir un nuevo desafío operacional y tecnológico: la productividad", sostuvo. Y luego dijo que es necesario el desarrollo de contenido local, hacer foco en la reducción del costo total y en lograr mayor eficiencia.

Antes de su esperada participación, Daniel Gerold, un especialista en temas energéticos y director de G& Energy, se las ingenió para hablar durante 20 minutos del mercado energético sin nombrar a YPF ni hacer referencia a la estatización de la principal empresa energética del país. Eso sí, con diplomacia advirtió que la reversión de la dependencia de combustible importado requiere una inversión importante. "Es necesario dar incentivos para activar el sector energético y para este shock de inversiones hay que atraer financiamiento, porque se necesitan miles de millones de dólares que en el mercado local no hay –dijo uno de los hombres más consultados por el sector petrolero–. Para poder activar la producción, hacen falta inversiones de 100.000 millones de dólares en cinco o seis años, una magnitud de inversiones que no se vio nunca en la Argentina. Es necesario atraerlas."

Además de hablar de la necesidad de generar un marco regulatorio claro y reglas de largo plazo, Gerold repartió culpas por la caída de la producción de petróleo. Sin embargo, no responsabilizó a las petroleras, sino a los medios de comunicación. "El año pasado, se dio el paro de petroleros más largo de la historia, que afectó el 20% de la producción. Y no hubo ninguna tapa de diarios en 120 días", alertó.

El gerente de Recursos No Convencionales de Tecpetrol, Mauro Soares, fue el encargado de explicar y cuantificar los yacimientos. "Es un recurso muy grande en extensión y volumen. La desventaja es que la roca requiere más inversión. Y no es fácil encontrar y hacerla producir", señaló el ejecutivo.