El Gobierno argentino autorizó la exportación de 1,5 millones de toneladas de trigo para la campaña 2013/14, de los cuales 500.000 ya están habilitadas para su venta de forma inmediata. El resto será liberado de forma gradual, anunció el ministro de Economía, Axel Kicillof.
Las autoridades limitan las exportaciones del cereal para garantizar el abastecimiento doméstico del grano y, de acuerdo a la intensión oficial, evitar alzas en los precios de los alimentos derivados. La información había sido adelanta por hoy por LA NACION .
"En la campaña actual, las estimaciones hablan de 9,2 millones de toneladas de trigo. Esto nos habilita, en un marco de prudencia, a liberar exportaciones por un millón y medio de toneladas este año, de manera gradual y secuencial. Así, ahora estamos autorizando 500 mil toneladas", dijo Kicillof.
La decisión la tomaron en conjunto el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich; Kicillof, y su par de Agricultura, Carlos Casamiquela.
Por un lado, se dará cumplimiento a una promesa que anticipó Casamiquela hace menos de un mes en una entrevista con este medio: darles prioridad en los embarques a los permisos de exportación prorrogados del ciclo pasado por 1,5 millones de toneladas.
Un dato: si el saldo total autorizado es de 2,5 millones de toneladas, sería un registro más bajo que el de 3 millones de toneladas de 2013. Habría que remontarse a 1978, 36 años atrás, para encontrar un registro más bajo de embarques, con 1,44 millones de toneladas.
