
Fiat y Sevel un divorcio sin remordimientos
Necesidades: las firmas adelantaron al 1° de julio próximo el acuerdo que vencía en 1997; Fiat quiere sostener el mercado; Sevel negociar con Peugeot.
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Tal como ayer anticipó La Nación Fiat Auto Argentina retomará a partir del 1° de julio próximo el control directo de la marca para la producción y comercialización de sus vehículos.
De esta manera se adelantó en un año y medio el cese de la licencia que tenía la empresa Sevel la que a partir de esa fecha profundizará sus planes de desarrollo con sus otras marcas licenciatarias Peugeot y Citroen.
El acuerdo fue anunciado por el director general de Fiat Auto para América latina Giovanni Razelli y el titular de Sevel Francisco Macri. Junto con ellos participó en el encuentro el presidente de Fiat Argentina Vincenzo Barello.
Razelli aclaró que a partir de julio los automóviles de la firma italiana se producirán con la responsabilidad y normas de calidad Fiat a través de una tercera compañía: Desarrollo Industriales Automotrices SA (Diasa).
Esta compañía le arrendará a Sevel sus instalaciones en Berazategui mantendrá el actual plantel de operarios y trabajará a fasón (por encargo) con la empresa de la familia Agnelli.
Los modelos
De acuerdo con el entendimiento al que arribaron el cronograma de producción será el siguiente:
- El Fiat Uno se producirá por encargo en la planta de Berazategui.
- La fabricación del Fiat Duna continuará en la planta que Sevel tiene en El Palomar y a partir del 1° de abril de 1997 la línea de montaje se trasladará a Berazategui.
- En el caso de la línea Spazio y Vivace (Fiat 147) el contrato prevé una autorización especial para que Sevel los fabrique a través de Diasa hasta el 31 de diciembre de este año con el objetivo de satisfacer a los adjudicatarios de los planes de ahorro hasta esa fecha. Posteriormente estos modelos dejarán de fabricarse y en esa gama serán reemplazados por el Uno Mille que bate récords de venta en el Brasil.
Las autoridades de Sevel y de Fiat confirmaron también que los concesionarios trabajarán en forma independiente que cada uno de ellos podrá optar por la marca que pretenda comercializar y que pese a la división el servicio de talleres será compartido.
De cara al futuro
El acortamiento en un año y medio de la relación que unía a ambas firmas (la licencia original vencía a fines de 1997) tiene dos claros motivos.
Por el lado de Fiat el objetivo apunta a mantener una participación estable dentro del mercado argentino ya que en los últimos meses las ventas cayeron del 30 al 17%. Para ello importarán unidades desde el Brasil (Tempra y Tipo) y relanzará la marca Alfa Romeo.
Para Sevel en cambio permitirá negociar sin ataduras con el grupo francés PSA y profundizar la comercialización de los productos Peugeot y Citroen dentro del Mercosur.
Macri y Barello interrumpieron de esta manera aunque con agradecimientos mutuos 37 años de sociedad.





