Independencia y calidad: el sello LA NACION para los principales empresarios de la Argentina

Periodismo de calidad, profesionalismo, innovación e independencia. Esa fue la síntesis que hicieron los empresarios más importantes de la Argentina para describir en pocas palabras a LA NACION en el festejo de sus 150 años anoche en el Centro de Exposiciones y Convenciones (CEC).

"Es una institución", afirmó, Héctor Magnetto, CEO del Grupo Clarín, sobre su competencia cuando llegó al encuentro por la escalinata compartida con la Facultad de Derecho. Juan Curutchet, presidente del Banco Provincia (Bapro), sacó su celular frente a varios asistentes y mostró una foto de un cuadro en la que aparecía su bisabuelo retratado, con un diario LA NACION bajo el brazo, para describir lo que la marca genera desde hace 150 años en todos sus lectores. "Ahí aprendí a ver las cotizaciones bursátiles", recordó, sobre su vínculo vital con el diario, Adelmo Gabbi, presidente de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.

El encuentro reunió a los hombres de negocios más importantes y experimentados del país, entre los que se encontraban Alejandro Bulgheroni (PAE), Gabriel Martino (HSBC), Cristiano Rattazzi (FCA), Miguel Acevedo (UIA), Daniel Pelegrina (Sociedad Rural), Eduardo Elsztain (IRSA), Guillermo Lipera (Será Justicia), Máximo Fonrouge (Colegio de Abogados de la ciudad de Buenos Aires), Javier Goñi (Ledesma), Martín Berardi (Ternium), Diego Prado (Toyota), Luis Galli (NewSan), Eduardo Coduri (EY), Sergio Kaufman (Accenture), Enrique Cristofani (Santander), entre muchos otros como Manuel Mantilla (Mercedes-Benz), Matías Patanian, (Aeropuertos Argentina 2000), Martín Cabrales (Cabrales), Mariano Rodríguez Giesso (Giesso), Juan Bruchou (ex Citibank y Brubank), Antonio Aracre (Syngenta), Fernando Storchi (Megatlon), Federico Braun (La Anónima), Facundo Gómez Minujín (JPMorgan), José Urtubey (Celulosa), José Aranda (Clarín), Ricardo Caló (Marriot), Pablo Beramendi (Google Argentina), Pablo Roemmers (Roemmers), Gastón Pérez Izquierdo (Catena Zapata) y Nicola Melchiotti (Enel), entre otros.

"Es mi desayuno de todos los días", describió Luis Galli, CEO de Newsan, ya en el salón en el que se desarrollaba el evento. A unos metros, Eduardo Coduri, de EY, recalcó: "Es institucionalidad. Es esencial para el periodismo independiente que sirve para la defensa de la república". Atrás sonaba el Himno Nacional.

"Es el diario de mis abuelos, mis padres, mis hijos y será el de mis nietos. Es casi el segundo evangelio de todas las mañanas", señaló Lipera, acompañado por Luis Betnaza (Grupo Techint) y Adrián Kaufmann Brea (hombre de Arcor y expresidente de la UIA).

"Leo LA NACION desde chiquito. Significa mucho para mí. Es periodismo independiente", afirmó Acevedo, presidente de la entidad fabril y director en Aceitera General Deheza (AGD). "Es la mejor fuente de información objetiva, profesional y confiable", aseguró el tributarista César Litvin cuando entró al centro de exposiciones porteño. Segundos antes habían ingresado Daniel Marx y Miguel Kiguel, dos economistas y exsecretarios de Finanzas de la Nación.

"LA NACION es importante porque tiene una historia coherente. A mí me preocupa mucho el tema institucional en la Argentina y siempre ha estado a la altura de las circunstancias. Para mí, LA NACION es valor agregado", afirmó Fonrouge.

"Es mi diario de cabecera", agregó Curutchet, tras mostrar con orgullo la foto de su bisabuelo. "Crecí leyéndolo y así sigo, con el papel", dijo el banquero, que bromeó con su edad y su apego al formato print ante el avance digital en los últimos años. "Es un diario que siempre tiene calidad periodística y ese es su gran mérito".

"Leo LA NACION desde chico, aunque a veces no comparta su línea editorial. Es formador de opinión. Lo valoro por su lugar y por eso, lo leo siempre", estimó De Mendiguren, expresidente de la UIA y actual diputado del massismo, que hoy está dentro de Frente de Todos.

"LA NACION tiene tradición en valores, pero es innovador por su capacidad de transformación en la industria de la comunicación", afirmó Prado, hombre de la japonesa Toyota. "Es un estandarte del periodismo independiente y clave para la opinión de la sociedad", agregó director de una de las automotrices más importantes que tiene hoy la Argentina. "Es el diario tradicional. Lo leo siempre. Y estoy seguro que es importante, porque sin medios independientes no hay democracia", afirmó Martín Berardi, CEO de Ternium Argentina.

"Leo LA NACION desde siempre. Mientras viví en el exterior lo pude seguir en su versión online. Esa conexión con la realidad argentina fue crucial. Hoy es mi lectura obligada de cada mañana, sobre todo por los editoriales", afirmó Manuel Mantilla, presidente y CEO de Mercedes-Benz Argentina, también presente en el evento. "LA NACION es un icono de excelencia en el periodismo argentino", agregó Matías Patanian, vicepresidente de Aeropuertos Argentina 2000.

"Me crié con LA NACION. Es el diario de cabecera por su característica de independencia y visión integral de los problemas de la Argentina y el mundo", dijo Pelegrina, número uno de la Sociedad Rural Argentina. "Para la Rural es fundamental para el respeto a las libertades de prensa, de opinión y de expresión", agregó el empresario, que reconoció además "el gran trabajo" que realiza la sección de Campo del diario. "Nos llena de oxígeno", describió.

Adelmo Gabbi caminaba por la explanada que lleva al centro de exposiciones cuando este cronista lo abordó con una pregunta al parecer más simple a las habituales. "¿Qué es LA NACION para usted?", lo consultó. "LA NACION es con lo que aprendí a leer. En los primeros años de los 50 yo vivía en Venado Tuerto y recibíamos el diario a la tarde. Fue el lugar en el que, desde que era chico, aprendí a ver las cotizaciones bursátiles", recordó el empresario.