La paradoja de Precios Justos: se aceleraron las subas en alimentos una semana antes del acuerdo

Al igual que sucedió, por ejemplo, en marzo pasado, cuando el presidente Alberto Fernández le declaró la guerra a la inflación, las versiones del relanzamiento del programa Precios Justos -que finalmente ocurrió el viernes pasado- habrían puesto en alerta a las empresas, que ajustaron los precios de alimentos y bebidas en un 2,7% la última semana, un aumento de dos puntos porcentuales respecto de los anteriores siete días.

El dato surge del informe de avance correspondiente a la quinta semana de enero de la consultora LCG, que releva los precios de 8000 productos de cinco supermercados. El producto que más subió fue carnes, que tuvo un aumento del 5,3% en la semana, seguido de comidas listas para llevar (3,8%), productos de panificación, cereales y pastas (3,3%), condimentos y otros productos alimenticios (3%), aceites (1,9%), productos lácteos y huevos (1,9%), bebidas e infusiones para consumir en el hogar (0,9%), azúcar, miel, dulces y cacao (0,2%), frutas (0%) y verduras (-2,6%).

Además, la semana que finalizó dio otro dato llamativo que fue que el 45% de la canasta total registró subas en la semana (el pico anterior había sido del 40% en la cuarta semana de diciembre de 2022).

“Habrá que confirmar la tendencia, pero esta mayor difusión de los aumentos coincide con la renovación del programa Precios Justos, pudiendo reflejar cierto tinte especulativo por parte de las empresas ante un nuevo congelamiento”, dijeron en la consultora dirigida por el economista Guido Lorenzo.

El índice de alimentos y bebidas presentó una inflación mensual de 5,3% promedio en las últimas cuatro semanas y 5,9% punta a punta en el mismo período.

Más allá de esto 6 de las 10 categorías ya presentan una inflación promedio por encima del 6% mensual en las últimas cuatro semanas: comidas listas para llevar (8,6%), productos lácteos y huevos (7,3%), frutas (7,2%), verduras (6,7%), bebidas e infusiones para consumir en el hogar (6,5%) y condimentos y otros productos alimenticios (6,1%).

Por otro lado, la consultora Eco Go registró en la última semana aumentos del 2,5% en promedio cuando las subas de los anteriores siete días habían estado en el orden del 0,8%.

En su relevamiento se destacaron bebidas alcohólicas (11,5%), carne vacuna (7,8%), azúcar y edulcorantes (4,3%) y gaseosas (3,6%).

“Por el momento no parece que haya habido mucha anticipación de aumentos por parte de las empresas, si no que la suba semanal se explica por la reacción del precio de la carne. Eso es lo que marca la diferencia en nuestro relevamiento”, explicó la economista Milagros Suardi.

La versión actual de Precios Justos, que arrancó el 1° de febrero y se extenderá hasta el 30 de junio, hace foco en 49.832 productos de 482 empresas de 15 rubros (consumo masivo, calzado, celulares, venta directa, hogar y construcción, indumentaria, útiles, insumos difundidos, pequeños electrodomésticos, chacinados, textiles bicicletas, medicamentos, combustibles y motos) que podrán tener incrementos de hasta un 3,2% mensual.

En cuanto a los 2000 productos de consumo masivo congelados, las canastas se renovarán con algunos productos que ingresarán en lugar de otros, mientras que los que queden tendrán aumentos. Los 2000 artículos no van a ser los mismos durante los cinco meses, sino que rotarán cada 60 o 90 días. En cuanto a los que salen del congelamiento, fuentes oficiales dijeron que podrían tener incrementos del 9 por ciento.

La carne

El caso de la carne es particular, ya que en las últimas semanas comenzó a aumentar por una recomposición del precio, tras el atraso que había tenido respecto de la inflación general a partir de mayo pasado (durante todo 2022 la hacienda solo subió un 30% y la carne al consumidor, un 46%, mientras que la inflación general fue del 94,8%).

De esta forma, durante la cuarta semana de enero, primero se incrementaron los valores de la hacienda en pie y luego comenzó a subir el precio de la carne para los consumidores entre un 20 y un 30% y no está claro si ese será el techo o el anticipo de nuevas alzas.

Frente a esto, fuentes del Ministerio de Economía adelantaron que esta semana se lanzaría un esquema por el cual los clientes de carnicerías que paguen con tarjeta de débito van a recibir el reintegro de $100 cada $1000 de compra de manera automática, con la acreditación del monto directamente en su cuenta.

En tanto, los establecimientos que se adhieran al régimen van a tener un descuento del 90% de la cuota de autónomos, es decir que van a pagarle a la AFIP solo el 10% de lo que determine la facturación por categoría.

Además, la carnicería va a tener la posibilidad de descontar el 5% de la factura de compra al frigorífico del impuesto a las ganancias y bienes personales para utilizarlo como crédito fiscal.

Por otro lado, fuentes del Ministerio de Economía y la Secretaría de Agricultura resaltaron que continúa vigente hasta fines de este año la imposibilidad de exportar los llamados siete cortes preferidos por el mercado argentino, sean frescos, enfriados o congelados. Se trata del asado con o sin hueso, falda, matambre, tapa de asado, cuadrada, paleta y vacío.