
Las privatizaciones alientan al Brasil
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SAN PABLO.- La privatización de las empresas estatales le reportará al Brasil 85.000 millones en los próximos tres años, según una estimación oficial. Hasta el momento, durante la etapa de ventas de empresas públicas iniciada en 1990, se recaudaron 44.500 millones de dólares, 28% aportados por capital extranjero.
Sólo en este año, Brasil recaudó casi 25.000 millones, más de la mitad de lo obtenido en los seis años anteriores. Una cifra similar se proyecta recaudar el año próximo, fundamentalmente con la venta de las empresas telefónicas. El anunció fue hecho ayer por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), que realiza el gerenciamiento de las privatizaciones en el país.
La Argentina no participa
Tras el comunicado,el doctor Federico Kauts recibió a La Nación . "Realmente no sabemos por qué las empresas argentinas casi no han participado del proceso privatizador brasileño", dijo. Menos del 0,1 del capital invertido hasta el momento en las estatales locales correspondió a capital argentino.
Consideró que las políticas de privatizaciones argentina y brasileña "son similares, aunque nosotros no queremos hacer como hicieron ustedes con el sector de comunicaciones, que convirtieron un monopolio estatal en dos monopolios privados. Nosotros vamos a garantizar la competencia en todas las regiones".
Otra diferencia es que Brasil, por ley, no puede privatizar su banco central, Petrobras -equivalente a YPF- ni las centrales nucleares.
El proceso de privatización brasileño se inició en 1990, con la venta de la siderúrgica Usiminas, tras la aprobación de una ley autorizando su venta. A diferente ritmo según los gobiernos pasaban, las privatizaciones no se interrumpieron jamás. Pero ahora es cuando el proceso se aceleró. "Estamos privatizando una empresa cada 20 días", dijo Kauts.
Hasta ayer, 76 empresas brasileñas fueron vendidas, incluyendo la banda de telefonía celular, que le reportará al gobierno casi 9000 millones cuando acabe la operación. Brasil ya privatizó 56 empresas federales, 15 provinciales y formó otras cinco empresas de telefonía celular. Esto le reportó hasta el momento 44.000 millones de dólares.
En ese monto, el capital extranjero participó con 24.700 millones. Estados Unidos aportó el 17%, España el 4%, Chile el 2%, Francia el 1,3%, Canadá el 0,4% y Alemania el 0,2%. La Argentina figura en una lista común para todos los países con menos de 0,1% de capitales invertidos.
El gerente de la Oficina de Privatizaciones brasileña explicó la presencia de Chile en la voluntad inversora de sus fondos de pensión. España simplemente estaría expandiendo sus aplicaciones regionales desde la Argentina y Chile. Francia participó con Electricité de France apenas en una privatización, la del mercado energético.
Este año, en palabras del propio Kauts, Brasil vendió "la joya de la corona": Vale de Rio Doce, la mayor minera de hierro del mundo, y la mayor productora de oro del Brasil. Solo el 55 por ciento del paquete accionario generó 3600 millones.
Aquí el sistema de privatizaciones dicta que primero se vende el control de la empresa. Luego se ofertan públicamente -interna y externamente- las acciones restantes.
Las empresas telefónicas, incluyendo las móviles, le rendirán al gobierno unos 30.000 millones cuando estén concluidas, probablemente en julio próximo.
El sector eléctrico, dijo el gerente del Bndes a La Nación , será vendido por unos 45.000 millones. Incluirá al grupo Electrobras, las generadoras y las distribuidoras provinciales. El monto representa lo que se obtuvo por las eléctricas en Chile y Argentina juntas.
Mientras, el programa de venta de puertos también avanza rápidamente. Hlla, una empresa de Hamburgo, ya se quedó con el de Santos. La red ferroviaria ya fue privatizada en su totalidad, y el sistema de agua y saneamiento está en estudio para ser ofrecido en los próximos meses.
El Bndes fue creado en 1952, y su único accionista es el gobierno federal. En 1990 fue escogido para gerenciar las privatizaciones. Estas son ordenadas por el Consejo Nacional de Desestatización, compuesta por un gabinete de ministros.




