Presupuesto familiar: hora de revisar los hábitos de consumo
Llevar un control exhaustivo de ingresos y gastos es fundamental para llegar a fin de mes, pero también para poner metas de largo plazo
En marzo el año arranca "formalmente" y, así como se puso especial empeño para organizar las vacaciones, ahora la lupa debería estar puesta en hacer cuanto antes una planificación financiera familiar, un ítem en el que los argentinos solemos hacer agua, pero que es crucial para no naufragar. Siempre debería ser una prioridad, pero mucho más en años de economías anoréxicas.
"¿Por qué es importante realizar un seguimiento minucioso de los ingresos y gastos de nuestro hogar?", postula Federico Noto, jefe de Operaciones de Wealth Management de HSBC. "Para poder tener una noción del dinero que tenemos disponible para encarar el día a día y así evitar situaciones de estrés por haber realizado una mala estimación. Además, planificar nos permite acercarnos a nuestros objetivos de corto, mediano y largo plazo", responde.
"La planificación no es más que definir, de forma metódica y estructurada, una serie de pasos para conseguir un resultado", apunta como primer dato Marcelo Elbaum, gerente de Negocios Institucionales de Allaria Ledesma y autor de libros sobre finanzas personales. Pone el resaltador sobre el primer punto en el que hay que hacer zoom: "Aún más que a nuestros ingresos, debemos prestarles especial atención a nuestros gastos, que siempre deben ser inferiores a lo que ingresa".
Armar un presupuesto mensual puede sonar a plan imposible o reservado solo a expertos en contabilidad, pero en realidad no es tan complejo. No está tan lejos de las viejas libretas de anotaciones de las abuelas, en las que llevaban un control minucioso de lo que gastaban en la casa. Hoy se pueden reemplazar por planillas de cálculos o apps del teléfono que hacen parte del trabajo por nosotros. "Cuando la economía general se complica, la familia tiende a tomar más conciencia de los gastos", aporta Diego Martínez Burzaco, economista y director de mercadoen5minutos.com
"Recomiendo empezar por lo más básico: la planilla de Excel –dice el economista– y allí categorizar por un lado los gastos fijos que sí o sí hay que afrontar mensualmente y no se pueden recortar, y también los gastos discrecionales, que pueden evitarse o recortarse en parte. En la columna siguiente, los ingresos, distinguiendo entre ingresos corrientes y/o extraordinarios para determinar un flujo mensual".
Poner las cosas en blanco sobre negro es la sugerencia de Noto para saber desde dónde arrancamos. "Muchas veces no tenemos noción de qué porción de nuestro ingreso destinamos a cada uno de nuestros gastos hasta que lo plasmamos en papel (o una hoja de cálculo). Es fundamental ver la foto de lo que estamos gastando mensualmente en cada ítem y compararla con nuestra visión de cuánto estamos en realidad dispuestos a atribuir a cada uno para poder llegar a cumplir con nuestros objetivos".
¿Qué ítems incluir en cada una de las columnas de la hoja de cálculos? "Por el lado de los ingresos, las principales categorías son: sueldo, renta por alquileres, rentas financieras y prestaciones familiares. Mientras que por el lado de los gastos tenemos gastos fijos como servicios, impuestos, alquileres y expensas, pago de cuotas de créditos o préstamos, cuotas de educación, transporte, bienes de nuestra canasta básica familiar y seguros, entre otros", detalla Noto.
Es importante no subestimar ningún gasto a la hora de volcarlo a la planilla de cálculo porque es asombroso cuánto dinero se va en cosas casi insignificantes. Hacer el ejercicio de anotar desde el café al paso hasta las compras en el quiosco.
"Es muy importante poner objetivos alcanzables y reales, para evitar la frustración. Toda planificación de gasto debe sentarse sobre ingresos reales y concretos, no en supuestos", advierte Martínez Burzaco.
Prestar especial atención a elaborar un presupuesto consciente es la columna vertebral para que cada familia alcance sus metas y pueda encarar sus proyectos, ya que para la mayoría de ellos, desde viajar hasta retirarse con espaldas financieras, se necesita dinero.
"Dentro del presupuesto familiar hay objetivos de ahorro y planificación para distintos horizontes temporales. Remodelar la casa, comprar un auto, hacer un viaje. Absolutamente todo tiene que tener un monto concreto de dinero a destinar (aproximado, ya que la inflación es una variable a considerar) y el plazo en el que lo queremos conseguir. A partir de allí se van ajustando los ingresos y gastos", explica Martínez Burzaco y destierra de plano la idea de poder ir primero por el objetivo y después pensar en cómo pagarlo.
En este punto –primero pensar y luego actuar– las tarjetas de crédito pueden ser aliadas o grandes enemigas. Son un anzuelo para desprevenidos. Pagar en cuotas está bien si hay una promoción sin (o muy bajo) interés y se va a adquirir un bien durable (y necesario… no para aumentar la colección de robots domésticos) o, por ejemplo, pagar parte de un viaje familiar. Antes, sí o sí, hay que sacar cuentas para ver si el ingreso mensual alcanza para afrontar la cuota, de otro modo la "penalidad" que nos cobra la tarjeta de crédito por no pagar el total del resumen a fin de mes comprometerá muy seriamente las finanzas familiares.
Finalmente hay que incorporar al presupuesto un porcentaje de ahorro mínimo para ir formando un fondo de resguardo. Federico Noto hace foco en las cinco principales áreas en las que las familias deben pensar al invertir: protección contra circunstancias imprevistas, provisión para la educación infantil y futuro, planificar y vivir en retiro, gestionar y hacer crecer la riqueza, y dejar un legado.
Tips a tener en cuenta
Tres factores claves a la hora de planificar el futuro financiero
Controlar los gastos
Los especialistas en finanzas personales destacan que más importante que generar más ingresos es aprender a controlar los gastos, para así lograr un superávit familiar.
Planificar el futuro
Tan importante como mantener bajo control ingresos y gastos, es tratar de definir cuáles son los horizontes personales y familiares en materia de ahorro e inversión.
Priorizar el ahorro
A lo largo de todas las etapas de la vida es fundamental incorporar en el presupuesto un porcentaje de ahorro mínimo.