TNT Argentina logró revertir los número en rojo
Con un cóctel de inversiones y selección de clientes, la proveedora de correo duplicó su facturación de US$ 8 millones en plena crisis
¿Qué hacer cuando los números no cierran y el trabajo a pérdida empieza a ser una constante? TNT Argentina, proveedor global de correo, distribución expresa y servicios de logística, encontró la solución en su propia gente, en la revisión de costos, en nuevos servicios especiales y en la selección de clientes.
La empresa, que pertenece a la holandesa TPG, desembarcó en el país hace cinco años y sólo en 1999 pudo comenzar a lograr que sus números fueran positivos.
En lo que va del año logró duplicar su facturación del mismo período de 2001 y ese año finalizó con una facturación de US$ 8 millones. También llegó a duplicar el número de cuentas, que hoy suman 1500.
Alan Gegenschatz, gerente general de TNT express desde 1999, comentó que para salir a flote "la firma decidió invertir en la capacitación de los empleados y acomodar la organización a estándares internacionales de servicio e infraestructura".
Actualmente, TNT Argentina, ofrece 5 días hábiles al año en capacitación a cada empleado. "Ponemos el esfuerzo en la gente porque es la que genera el servicio, la lealtad y el ingreso de clientes", señaló el directivo, que cada tres meses sale a repartir paquetes para estar en contacto con los couriers.
La empresa cuenta en la actualidad con 130 empleados y gracias al crecimiento que viene experimentando, continúa contratando en medio de la recesión. Para los próximos dos años y medio tiene previsto inversiones por 400.000 euros, que estarán dirigidas al desarrollo de tecnologías y servicios.
En los últimos cinco años, la firma invirtió 10 millones de euros en el país, de los cuales 700.000 fueron destinados a la renovación de la planta ubicada en Barracas, que le permitió optimizar el desempeño general de la firma con un nuevo soporte tecnológico.
Eslabones unidos
Para enfrentar los cortes en la cadena de pagos, la firma optó por la selección de clientes y decidió quedarse con el mejor pedazo de la torta. Así, endureció los límites de créditos y tiempos de cobranza al tiempo que descartó potenciales clientes que no ofrecían la seguridad suficiente a la hora del pago.
En el cóctel de medidas que permitieron a la compañía crecer, figura también una política comercial que TNT define como fuerte y agresiva. En ese sentido, la empresa asegura que su departamento de call center es clave para ganar clientes en el mercado.
En conjunto las políticas implementadas permitieron a la empresa alcanzar un 11% de participación en el mercado, dentro del cual compite principalmente contra Federal Express y DHL.
Tras recuperarse la empresa buscó la forma de mantener su desempeño. Así, apeló a la revisión de tarifas para los mercados internacional y local. El negocio internacional -exportaciones e importaciones-, no sufrió mayores cambios en las tarifas a partir de la devaluación, puesto que éstas siempre se manejaron y manejan en dólares.
La devaluación permitió un crecimiento en las exportaciones que benefició a la firma. Así, comenzó a exportar vinos y pescados desde Mendoza y Mar del Plata respectivamente.
En el nivel local, la empresa decidió mantener las tarifas. Al respecto, Gegenschatz señaló: "La devaluación nos afectó porque encareció los costos, pero decidimos resignar rentabilidad y mantener nuestra estrategia de convertirnos en proveedores integrales de servicios".
La compañía revisaría sus tarifas sólo si los costos nacionales suben a un punto tal "que generen pérdida para la firma".
TNT Argentina, sin embargo, no intenta diferenciarse de sus competidores por las tarifas sino por los servicios, que se ven respaldados a nivel mundial por una flota de 130.000 empleados, 19.000 vehículos y 61 aviones.
Siguiendo la estrategia, TNT lanzó, entre otros, el servicio Sameday, que consiste en la llegada de paquetes a países limítrofes en el mismo día de envío.
Los argentinos que resolvieron dejar el país crearon un nuevo mercado para la compañía, que hoy ofrece embalajes a medida que trasladan pertenencias de un lado al otro del Atlántico.
Los destinos más frecuentes son España e Italia en Europa y Chile y Brasil en América latina, según comento Gegenschatz. Los embalajes y envíos varían de acuerdo al destino, el volumen y el peso, pero tienen un costo base de US$ 500.
Además, la empresa colabora con dos ONG por medio de su política social empresaria. El programa de voluntariado les da a los empleados la oportunidad de participar cinco días hábiles al año con las fundaciones, una de ellas Fundae.
Al cierre de 2001, tuvo un incremento del 236% en el kilaje de documentación y un aumento del 267% en los envíos realizados respecto del año anterior.