Atentados y tensión en el Líbano

BEIRUT.- En una ofensiva terrorista que amenaza con agudizar la tensión en el Líbano, dos bombas colocadas en sendos colectivos de pasajeros estallaron ayer en una localidad cristiana cerca de Beirut, con un saldo de tres muertos y 20 heridos.

Los ataques ocurrieron en la víspera del segundo aniversario del asesinato del ex primer ministro antisirio Rafik Hariri, por lo que diputados oficialistas acusaron a partidarios de Damasco de estar detrás de los atentados. Según denunciaron, el objetivo sería crear temor en la población y boicotear la manifestación que está prevista para hoy en memoria de Hariri.

El incidente hace temer que recrudezcan los violentos enfrentamientos entre los partidarios del premier Fouad Siniora, que es respaldado por Estados Unidos, y la oposición, que lidera el grupo chiita Hezbollah, apoyado por Siria e Irán.

Las explosiones ocurrieron en el pueblo de Ain Alaq, de mayoría cristiana, ubicado a unos 30 kilómetros de Beirut, y en horas de la mañana, con cinco minutos de diferencia. Fueron provocadas por bombas que estaban escondidas en los colectivos, que suelen transportar a trabajadores desde los pueblos cristianos de la montaña hasta Beirut. La coalición antisiria en el Congreso acusó a Damasco y pidió a las Naciones Unidas sanciones contra ese país.

Hariri murió el 14 de febrero de 2005 en un atentado en el que perdieron la vida también otras 22 personas. Una investigación de la ONU involucró a miembros de los servicios de seguridad de Siria en ese ataque, lo que obligó a Damasco a retirarse del Líbano, después de más de 30 años de ocupación. Desde la muerte de Hariri, el Líbano se ha visto sacudido por una ola de asesinatos de figuras antisirias y de choques entre partidarios del gobierno y de Hezbollah.