
Chicos de 11 años, asesinos de la mafia
Se acaba de descubrir una "escuela" del crimen en Sicilia, donde adiestran a menores de edad
1 minuto de lectura'
ROMA.- Aunque es un tema que se ha hecho conocido hace años por medio de la saga de los Corleone del difunto Mario Puzo, en Italia la mafia es hoy un mal endémico. Y no pasa un día en que la prensa no informe de asesinatos, matanzas o ajustes de cuenta entre familias o clanes. Una cruda realidad que va mucho más allá de cualquier guión de Hollywood, que se convirtió en una verdadera emergencia para el gobierno italiano, incapaz de aniquilar el crimen organizado.
Al reciente aumento del número de delitos, a las declaraciones del presidente de la comisión antimafia del Parlamento, Ottaviano del Turco, que habló de una "derrota del Estado y del colapso de la Justicia" en Sicilia, centro neurálgico de la mafia, se sumó hace unos días una revelación que conmovió aún más a la opinión pública: la existencia de una "escuela" que enseña a chicos de 11 años a convertirse en sicarios de la mafia.
Cadena de homicidios
La alarmante noticia se supo tras la investigación sobre una cadena de homicidios que ensangrentó Gela, provincia de Caltanissetta, en Sicilia, con cuatro víctimas en menos de tres días.
"En Gela -dijo Giovanni Tinebra, jefe de la fiscalía antimafia de la zona- hay una escuela del crimen, alternativa de la escuela normal. En vez de ir al colegio, muchos chicos se van al campo, donde hay quienes les enseñan a disparar, para usarlos, cuando haga falta, como máquinas de matar."
Uno de estos "baby-killer", como los bautizó la prensa, habría participado en dos de los últimos asesinatos que volvieron a poner en el tapete a la "emergencia mafia" en Gela, donde el lunes último viajó la ministra del Interior, Rosa Russo Jervolino, para demostrar que el "Estado italiano también está ahí", pese a todo.
Bajo protección
Este joven, que hoy tiene 17 años y ahora está bajo el programa de protección previsto para los colaboradores de la Justicia, no sólo reveló cuál fue su papel en la última matanza de Gela, sino que también contó qué hay detrás de estas "escuelas" para aspirantes a sicarios, manejadas por Cosa Nostra.
En su caso, ya a los once años era llevado a la campiña y era adiestrado por algunos mafiosos a disparar con cualquier tipo de arma.
"Ahora está confirmado que en Gela -dijo el fiscal Tinebra- hay una industria de jóvenes sicarios de la mafia. Primero se les enseña a tirar, después se les entrega una pistola y con su ciclomotor cumplen su misión: es decir, matar a la víctima designada. Una tarea, que, lamentablemente, saben cumplir muy bien."
El joven arrepentido que reveló la existencia de esta "otra escuela", al parecer no disparó en los últimos homicidios de Gela, sino que se limitó a "hacer de palo" y a manejar el ciclomotor utilizado para la fuga.
"Estas son las primeras misiones que se encargan a los jóvenes aspirantes a ´killer´ -agregó Carmelo Casabona, jefe de la unidad móvil de Caltanissetta-. Se trata de tareas de apoyo antes de convertirse en verdaderos sicarios. A ellos les toca hacer de vigía, ir a buscar las armas en los escondites y, si es necesario, disparar. Y desde hace tiempo que ha bajado notablemente la edad en la que los menores comienzan a matar".
Una rápida carrera
En Gela hay jóvenes que han quemado etapas en su carrera criminal. Simone Ianní, por ejemplo, contó a la Justicia que cometió su primer asesinato a los 13 años. Y Orazio Vella, a los 14.
El problema es que allí no sólo se da una guerra entre familias, sino también una lucha a muerte por asegurarse el control de la provincia mediante los miles de millones de liras que tiene previsto invertir el Estado en esta región del empobrecido sur del país.
"En Gela -explicó el fiscal Tinebra- casi todos los comerciantes pagan el Ôpizzo´ (impuesto mafioso), que va desde 500.000 liras (cerca de 300 dólares) a un millón y medio (900 dólares) por mes".
Según el diputado Giuseppe Molinari, miembro de la comisión antimafia, el uso de niños en actividades delictivas en tareas que van desde "observar a los rivales hasta hacer de correos de droga o cigarrillos de contrabando", no es algo nuevo.
Es una práctica que no lleva a cabo sólo la Cosa Nostra en Sicilia, sino también la Camorra napolitana, la n´drangheta calabresa, y la Sacra Corona Unita de Puglia.
Lo que se desconocía era la existencia de entrenamientos armados. Según datos de la policía, en los primeros meses de 1999 fueron denunciados 7726 menores como responsables de 10.260 delitos.
Una cruda realidad que va más allá de cualquier guión de Hollywood.
1
2Video: la sorpresa de los trabajadores de Bimba y Lola que ganaron cientos de miles de euros en la Lotería
3Quién era Fanil Sarvarov, el general ruso que dirigió operaciones en Siria y murió en un atentado con coche bomba en Moscú
- 4
Asesinaron a un alto general ruso con un explosivo debajo de su auto en Moscú

