Colombia confirma la presencia de 1500 miembros del ELN y disidencias de las FARC en Venezuela

BOGOTÁ.- En medio de las repetidas denuncias de Colombia sobre una alianza de Venezuela con rebeldes colombianos, un informe de la Inteligencia colombiana reveló datos, números y posiciones de esas bandas del otro lado de la frontera, convertida en un santuario de actividades criminales.

Los servicios de Inteligencia señalaron en un reporte de 50 páginas la presencia en territorio venezolano de unos 1500 hombres armados tanto del Ejército de Liberación Nacional (ELN) como de las disidencias de las antiguas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

El documento incluye frentes, nombres, cifras y zonas de “injerencia” y actividades ilegales de estos grupos, financiados en parte mediante el narcotráfico. Algunos están enfrentados entre sí y a la vez aliados o enfrentados con las Fuerzas Armadas venezolanas.

Su difusión tuvo lugar después de que el presidente de Colombia, Iván Duque, denunció en numerosas ocasiones que existe un vínculo entre el gobierno de Nicolás Maduro y los grupos criminales colombianos que “se refugian en Venezuela”, donde tienen santuario.

El texto destaca la capacidad de estos grupos para asentarse en territorio venezolano y “capitalizar la situación económica y social” existente. “Han logrado reclutar un gran número de ciudadanos de ese país en sus filas, a los que ha ofrecido protección y recursos económicos”, afirma.

En territorio venezolano, de acuerdo con el documento de inteligencia, la presencia histórica ha sido la del ELN, con unos 1100 hombres dedicados básicamente a la extorsión, a través de los frentes de guerra ‘Norte’, ‘Nororiental’ y ‘Oriental’, además de un nutrido grupo de milicias urbanas. El ELN “utiliza el territorio venezolano como retaguardia estratégica”. Es decir, delinque en Colombia y cruza la frontera para ocultarse y evadir a la fuerza pública.

Para los organismos colombianos, esa guerrilla, por años, ha “realizado coordinaciones económicas con el fin de mantener el control de los corredores de movilidad”.

Las redes disidentes de las FARC, que se negaron a acatar la desmovilización de 2016, concentrarían por su parte sus actividades mediante negociaciones con cárteles del narcotráfico en Venezuela, Brasil y México, donde controlarían una veintena de pistas clandestinas.

El informe señala la reciente detección de 623 trazas de vuelos irregulares que despegaron de Venezuela cargados con toneladas de cocaína con destino a mercados internacionales. En los últimos 20 días se registró un aumento del 100% de esos vuelos narco.

La semana pasada se detectó un avión cuyas trazas no estaban registradas y que fue obligado a aterrizar en Guatemala “en cercanías de la frontera con México”, donde se le incautaron dos toneladas de cocaína.

Aunque estas redes disidentes de las FARC habrían ingresado a Venezuela -hace cuatro o cinco años- con el beneplácito de las autoridades mediante el pago de dádivas, esa alianza se rompió y hoy están enfrentadas.

“Han logrado concentrarse en el estado de Amazonas, donde todos los grupos armados buscan controlar corredores de movilidad hacia las zonas fronterizas”, dice el documento.

Mientras algunas facciones chocan incluso con las Fuerzas Armadas venezolanas, la llamada Segunda Marquetalia concretó “el respaldo de Maduro, con el cual tienen afinidad ideológica e intereses económicos”, dice el documento, basados en distintas actividades criminales, entre ellas el tráfico de armas.

Agencia ANSA y El Tiempo/GDA