Escandaliza en Francia un juego que simula una silla eléctrica

Por Luisa Corradini
Especial para lanacion.com

PARIS-. Veintisiete años después de su abolición, la pena de muerte volvió a Francia bajo la grotesca forma de un juego en un parque de diversiones, provocando un escándalo nacional que obligó a los responsables políticos a tomar medidas para prohibirlo.

El escándalo estalló en Francia cuando el propietario de una atracción del Luna Park de Fréjus, en la Costa Azul, decidió rentabilizar una auténtica silla eléctrica, aunque fuera de uso, que había comprado el año pasado por 10.000 dólares en Orlando (Estados Unidos).

La macabra diversión que inventó consiste en reproducir una ejecución utilizando un maniquí de látex que simula al condenado a muerte. El muñeco está sentado en una silla eléctrica, dentro de un gran paralelepípedo de vidrio iluminado con una mortecina luz azul. En el momento de su "ejecución", la "víctima", accionada por un mecanismo hidráulico, lanza alaridos y se contorsiona, mientras un espeso humo se escapa de sus pies hasta que la cabeza cae brutalmente hacia un lado.

El espectáculo, que ya había sido prohibido en Milán, apenas fue tolerado algunos días en el sur de Francia hasta que las protestas populares obligaron al intendente de Fréjus a prohibirlo.

Esa atracción debía llegar a París el viernes próximo en el marco de la llamada "Fête au Bois", instalada cerca de los Bosques de Vincennes durante dos meses. Sus organizadores esperan que el centenar de juegos propuestos atraigan cerca de un millón y medio de visitantes.

Pero el macabro juego "electrizó" a los concejales y al alcalde de París, que solicitó a la Prefectura de la capital su prohibición.

El Prefecto, principal autoridad de la ciudad en temas de seguridad, prometió hacer conocer su decisión en las próximas horas. Por su parte, acosados por el escándalo, los responsables del parque de diversiones podrían decidir retirarlo.

"Es absolutamente increíble que a alguien se le ocurra proponer este tipo de atracción", se escandalizó el diario Le Monde . "Pero si así es, continuó, es porque el cliente potencial existe, siempre sediento de sufrimientos, de morbo y de horror".

El empresario Marcel Campion replicó en su defensa que, si se "prohíbe ese espectáculo con el argumento del morbo, entonces también habrá que aplicar ese criterio en la televisión".

Las asociaciones que luchan contra la pena de muerte en el mundo deploraron ese tipo de atracciones, pero expresaron su inquietud por el éxito que tuvo. "Lo importante, sostienen, es tratar de comprender por qué ese espectáculo suscita tanto interés".

"Es alarmante notar la fascinación del público ante una ejecución", señalaron.

La silla eléctrica nunca existió en Francia que, desde la Edad Media, utilizó la guillotina para aplicar la pena de muerte. Este país abolió la pena capital en 1981.

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