Imágenes satelitales muestran como cientos de miles de rusos huyen a países vecinos para evitar el reclutamiento

MOSCÚ.– El anuncio de movilización parcial de reservistas del presidente Vladimir Putin para combatir en Ucrania, llevó a cientos de miles de rusos a huir del país para evitar el reclutamiento.

La cifra de rusos que llegan diariamente a la vecina Georgia casi se ha duplicado, hasta casi 10.000 personas por día, tras el anuncio militar efectuado el 21 de septiembre, indicó el Ministerio del Interior.

”La cifra subió a unos 10.000 por día. Por ejemplo, fueron 11.200 el domingo y menos de 10.000 el lunes”, frente a “5000 a 6000″ antes del anuncio, indicó el ministro del Interior, Vakhtang Gomelauri.

En la frontera con Georgia, las autoridades de la región rusa de Osetia del Norte admitieron que la situación es “tensa” en el punto de control de Verkhni Lars. Las autoridades locales anunciaron la próxima instalación de una comisaría militar de movilización en la zona fronteriza para reclutar a los reservistas que intenten salir del país.

Las imágenes satelitales distribuidas por Maxar mostraban una fila de más de 16 kilómetros de longitud a lo largo de la frontera con Georgia.

“No tengo otra alternativa que huir de Rusia”, declaró Nikita a la AFP en el lado georgiano del puesto fronterizo de Kazbegi. ”¿Por qué voy a querer ir a esa guerra loca?”, preguntó el hombre de 23 años. “Yo no soy carne de cañón, no soy un asesino”, indicó mientras un buitre rondaba en el cielo.

Para ahorrar tiempo debido a las largas filas, muchos rusos decidieron cruzar en monopatín eléctrico, bicicleta o incluso a pie.

En tanto, en Kazajistán, una exrepública soviética de Asia Central, las autoridades informaron que 98.000 ciudadanos rusos han llegado al país desde el 21 de septiembre, sin proveer datos de comparación con la semana anterior.

El presidente kazajo, Kasim Jomart Tokayev, afirmó que protegerá a los rusos que huyen hacia su país. ”Estos últimos días, mucha gente viene de Rusia a nuestro país. La mayoría están obligados a raíz de una situación sin salida”, declaró el mandatario, según las agencias de prensa rusas.

”Debemos ocuparnos de ellos, garantizarles su seguridad”, agregó este aliado de Moscú que ha tomado distancia del Kremlin tras la ofensiva rusa en Ucrania.

La Guardia Fronteriza de Finlandia, otro punto caliente, afirmó hoy en Twitter que el lunes 26 de septiembre registró la entrada de “7743 rusos a través de la frontera terrestre”, de los cuales 3662 luego abandonaron el país.

“El tráfico sigue siendo pesado, pero ha disminuido desde el pico del fin de semana: la mayoría de los que ingresan van a otros países”, se lee en la actualización.

Según datos publicados por ese cuerpo, el 19 de septiembre (antes de que Putin declarara la movilización “parcial”), los ingresos desde Rusia habían sido 3100. La cantidad aumentó gradualmente hasta el pico registrado el sábado (8582). Por tanto, considerando el acumulado de la semana, 50.108 ciudadanos rusos entraron en Finlandia hasta la fecha. De estos, 28.466 abandonaron Finlandia y se dirigieron a otros países de la Unión Europea (UE).

Frontex, el servicio de fronteras de la UE, informó por su lado, que un total de 66.000 rusos ingresaron al bloque entre el 19 y el 25 de septiembre, un aumento del 30% respecto a la semana anterior.

La mayor parte de los rusos ingresaron a la UE a través de los pasos fronterizos con Finlandia y Estonia. ”Los ingresos aumentaron significativamente en Finlandia tras la anunciada movilización en Rusia”, sostuvo el organismo en un boletín informativo.

”El 19 de septiembre, Estonia, Letonia, Lituania y Polonia comenzaron a aplicar restricciones al ingreso de ciudadanos rusos que viajan exclusivamente por turismo u ocio, y restricciones hay similares en curso en Finlandia”, añadió Frontex.

Los hombres en edad militar también han huido por aire. Mientras muchos vuelos de línea se agotaron para los próximos días, el diario británico The Guardian informó hoy que la demanda de plazas en aviones privados también aumentó. Agregó que los pasajeros se dirigían principalmente a Armenia, Turquía y Azerbaiyán, que permiten a los rusos ingresar sin visa.

Los que quieren escapar pagan aproximadamente unos 28.000 euros por un lugar en un avión privado, mientras que el precio de alquilar un jet de ocho plazas oscila entre 90.000 y 160.000 euros, mucho más caro que la tarifa normal.

“La situación es absolutamente loca en este momento”, dijo Yevgeny Bikov, director de una firma de alquiler de aviones, Your Charter. “Recibíamos 50 solicitudes por día; ahora son alrededor de 5000″, detalló.

Agencias AFP, ANSA y AP

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