Irán eleva su desafío al superar otro límite del acuerdo nuclear

TEHERÁN.- El gobierno de Irán anunció ayer que cruzó otro de los límites establecidos por el acuerdo de 2015 con las grandes potencias, al impulsar la experimentación de centrifugadoras capaces de enriquecer uranio a una velocidad diez veces superior que las que ya están en uso.

La decisión de Irán esfuma el entusiasmo suscitado por la insistente acción diplomática de Francia. Con esta decisión se reduce el tiempo necesario para cruzar el umbral crítico del 90% necesario para producir la bomba atómica.

El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), con sede en Viena, subrayó que "inspectores de la agencia están en Irán y reportarán cualquier actividad relevante a la sede de la OIEA".

El presidente iraní, Hassan Rohani, ya había anunciado esta medida hace tres días, cuando las negociaciones telefónicas con su par francés, Emmanuel Macron, no fueron suficientes para inducir a los países europeos a proporcionar a Irán una línea de crédito de 15.000 millones de dólares, garantizados por el petróleo iraní, que Teherán solicitó para volver a cumplir con el acuerdo.

Tampoco alcanzaron las gestiones de Macron, cuando invitó al ministro de Asuntos Exteriores iraní, Mohammad Javad Zarif, al G-7 en Biarritz. Esos diálogos fueron insuficientes para que la República Islámica aceptara los llamados a la moderación de los europeos.

A Alemania, Francia y Gran Bretaña, que junto con China, Rusia y Estados Unidos firmaron el acuerdo sobre energía nuclear en 2015, Irán les pide que cumplan sus promesas de ayudarlos a hacer frente a la grave situación económica en que se encuentra desde que Washington decidió, el año pasado, retirarse del acuerdo. Porque esa determinación reintrodujo sanciones muy severas contra Teherán.

En particular, la República Islámica pide poder volver a exportar su petróleo. En espera de una respuesta concreta del lado europeo, Teherán decidió proceder gradualmente a una reducción de las limitaciones impuestas.

"Todos los pasos son reversibles", dijo el jefe de la Agencia de Energía Atómica de Irán, Behrouz Kamalvandi, tan pronto como "las otras partes cumplan sus promesas". Aunque, agregó, "no queda mucho tiempo para salvar el acuerdo".

A partir de julio pasado, Irán cruzó primero el umbral permitido de 300 kilogramos de uranio enriquecido a bajo nivel y luego lo aumentó desde el límite esperado de 3,67% a 4,5%.

Aunque está lejos de lo que es necesario para el empleo militar, Kamalvandi advirtió que Teherán tiene la capacidad de alcanzar "mucho más allá del umbral del 20%". Y para ese propósito tendrían una función determinante las nuevas centrifugadoras -20 del modelo IR-4 y 20 del modelo IR-6-, en las que desde ayer se inyecta gas de uranio. Se trata de modelos mucho más potentes que las obsoletas centrífugas 5060 IR-1, que a Irán se le permitió mantener en funcionamiento.

Reacciones

La ministra de Defensa francesa, Florence Parly, reaccionó ante el anuncio iraní y afirmó que París continuará con sus esfuerzos para convencer a Teherán para que vuelva a cumplir con los términos del acuerdo.

Por su parte, la cancillería británica expresó su "decepción" con el nuevo anuncio iraní. Y el secretario de Defensa norteamericano, Mark Esper, dijo que su país "no está sorprendido" por el movimiento de Teherán. En realidad, Estados Unidos sostiene que Irán, simplemente, continúa "tratando de hacer lo que ha intentado hacer durante muchos años", es decir, equiparse con armas nucleares.

Agencias ANSA y AP