Nueva era en EE.UU. / Las reacciones y el círculo cercano al presidente. La familia de Obama, símbolo del multiculturalismo en EE.UU.
Sus miembros proceden de distintos países y hablan lenguas diferentes; muchos son pobres
WASINGTON.- La anciana abuelastra del presidente le compró, para la asunción, una cola de buey para espantar las moscas, un símbolo de poder en Kenya. Los primos viajaron desde la ciudad de Carolina del Sur en la que el tatarabuelo de la primera dama nació como esclavo, mientras el rabino de la familia vino de la sinagoga en la que había conmemorado el nacimiento de Martin Luther King.
También los hermanos del presidente y de la primera dama estaban presentes: la medio hermana indonesio-norteamericana de él, quien llegó acompañada por su esposo chino-canadiense, y el hermano de ella, un hombre negro con una esposa blanca. Cuando Obama prestó juramento anteayer, estaba rodeado por un clan ampliado que hubiera escandalizado a generaciones anteriores de estadounidenses y que instantáneamente modificó la imagen de una primera familia para las generaciones futuras.
Durante el transcurso de más de dos siglos, los Estados Unidos han sido mucho más diversos que sus familias gobernantes. Ahora la familia Obama ha cambiado la situación, con un elenco en tecnicolor que no se parece en nada a la de sus predecesores, abrumadoramente blancos y protestantes, que tuvieron antes el mismo papel. La familia de la que proceden Barack y Michelle Obama es negra y blanca y asiática, cristiana, musulmana y judía. Sus miembros hablan inglés, indonesio, francés, cantonés, alemán, hebreo; lenguas africanas que incluyen el swahili, el luo y el igbo. Muy pocos de ellos gozan de una situación económica acomodada y algunos son muy pobres.
Aunque el mundo celebra la asunción del primer presidente afro-americano, la historia es más compleja: una historia de inmigración, movilidad social y la desegregación de una de las últimas instituciones divididas de la vida estadounidense: la familia.
Aunque Obama es hijo de un keniata negro, tiene algunas raíces presidenciales convencionales por parte de su madre blanca: abolicionistas que, según la leyenda familiar, fueron expulsados de Missouri, un estado esclavista; gente del Medio Oeste que supo hacer frente a la Depresión; incluso un puñado de remotos antecesores que lucharon en la guerra de la independencia.
Pero se sabe mucho menos sobre los orígenes de la primera dama. Basándose en antiguos datos de censos, registros familiares y entrevistas, resulta claro que Michelle Obama es descendiente de esclavos e hija de la Gran Migración, el movimiento masivo de afroamericanos hacia el Norte, quienes se trasladaron a mediados del siglo XX en busca de oportunidades.
Raíces
Hace tan sólo cinco generaciones, el tatarabuelo de la primera dama, Jim Robinson, nació como esclavo de la Plantación Friendfield de Georgetown, Carolina del Sur, donde se dedicó a drenar ciénagas y a cosechar arroz, y donde fue enterrado en una tumba sin lápida.
Según Megan Smolenyak, una especialista en genealogía que ha descubierto las raíces de muchas figuras políticas, Michelle Obama tiene antecesores de un origen similar desperdigados por todo el Sur.
Sin embargo, el progreso de la familia se produjo con el patrón de dos pasos hacia adelante y uno hacia atrás. Jim Robinson nació en la esclavitud, pero su hijo, Fraser, tenía un puesto rodante de comidas en Georgetown. A su vez, su hijo, Fraser Jr., se marchó a Chicago en busca de algo mejor, pero no logró hallar empleo y abandonó a su esposa y a sus hijos durante 14 años. Como resultado, el padre de Michelle Obama vivió de los subsidios sociales y empezó a trabajar como repartidor de leche a los 11 años.
A pesar de las grandes diferencias que existen entre la historia de los Obama y de los Robinson, hay algunos nexos que los unen. La educación es uno de ellos. De joven, el padre de Obama era pastor de cabras, después ganó una beca para estudiar en la capital de Kenya. Cuando Barack Obama vivía en Indonesia, en la infancia, su madre lo despertaba a las 4 de la mañana para que tomara clases de inglés.
Generaciones de Robinsons les enseñaron a sus hijos que sólo gracias a la educación podrían tener éxito en una sociedad racista, según relataron sus parientes. "Mi madre solía decir: «Cuando adquieres conocimientos, adquieres algo que nadie podrá quitarte»", dijo Craig Robinson.
En lo referido a audaces saltos entre culturas, ninguna figura iguala a Stanley Ann Dunham Soetoro, la madre de Barack Obama. Cuando era estudiante universitaria en Honolulu, frecuentaba una organización de intercambio cultural donde conoció a dos esposos: primero a Barack Obama, un estudiante de economía de Kenya, y más tarde a Lolo Soetoro, un indonesio.
Ahora, la llegada de la familia Obama-Robinson a la Casa Blanca parece poner un simbólico fin a la antes arraigada idea de que las personas de diferentes orígenes no debían ser novios, casarse ni tener hijos.
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