Milagroso rescate en el mar a 14 días del tsunami

KUALA LUMPUR, Malasia (AP).- A dos semanas del devastador tsunami que arrasó las costas de Asia y cuando las esperanzas de hallar sobrevivientes eran prácticamente nulas, un náufrago indonesio y un grupo de marineros árabes protagonizaron lo que para muchos puede ser considerado un milagro.

Anteayer, la tripulación del barco portacontenedores Al Yamamah -operado por una empresa de Emiratos Arabes Unidos- divisó flotando en una improvisada balsa en alta mar, a unos 170 kilómetros de la costa, a Ari Afrizal. El 26 de diciembre, cuando el maremoto golpeó las costas de su país, este joven de 22 años estaba construyendo una casa en la ciudad de Krueng Sabi, en la provincia de Banda Aceh. La descomunal marejada se lo llevó aguas adentro.

El joven estuvo 14 días navegando a la deriva, sobreviviendo a base de cocos, antes de ser rescatado por la tripulación del carguero que cumplía la ruta entre Omán y Malasia.

Hubo que esperar hasta última hora de ayer para conocer más detalles sobre su odisea.

"Había perdido toda esperanza de sobrevivir -declaró el joven a los más de 70 periodistas que lo rodearon en cuanto descendió del barco en West Port, unos 40 kilómetros al sudoeste de la capital-. Los tres últimos días había dejado de comer y de beber. Pero estoy muy agradecido de haber sido salvado", dijo, según la agencia de noticias Bernama, de Malasia.

Afrizal relató que, cuando estaba flotando en el mar, tuvo la suerte de encontrar un bote en el que viajaban tres personas y que logró abordar. Sin embargo, poco tiempo después, la embarcación comenzó a hacer agua y se hundió. Las otras tres personas desaparecieron.

Ya a punto de ahogarse, Afrizal descubrió una balsa y logró aferrarse a ella. Fue su salvación. Después de tres días, en los que se alimentó con la pulpa y el agua de los cocos que pasaban flotando, fue rescatado por el Al Yamamah.

El náufrago, que fue recibido en la embajada de Indonesia en Kuala Lumpur, se convirtió en el tercer sobreviviente del tsunami en ser rescatado tras varios días en altamar. Los otros dos también fueron llevados a Malasia.

El 30 de diciembre, un barco atunero malayo rescato a una mujer embarazada, que se mantuvo a flote durante varios días aferrada a una palmera. La mujer estaba quemada por el sol y presentaba mordidas de peces, pero su bebe se encuentra bien.

La semana pasada fue rescatado en una situación similar Rizal Shahputra, un indonesio de 20 años que flotó a la deriva durante ocho días sobre un montículo de ramas, antes de ser divisado por un barco de carga malayo.

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