B.A.Rock, un festival que intenta refundarse a pesar de todo

Treinta y cinco años después de su cuarta y última edición (celebrada en las canchas de rugby del club Obras Sanitarias, en 1982), el mítico y fundacional festival B.A.Rock f volvió al ruedo con un doble objetivo: sumarse a los festejos por las primeras cinco décadas del rock argentino y reunir en un mismo espacio y durante tres días consecutivos a los artistas históricos, a los de hoy y a los emergentes. Así, lo que intenta es lograr la confluencia de varias generaciones para compartir, disfrutar y, en el caso de los más jóvenes, escuchar quizá por primera vez en vivo a varios de los pioneros de nuestro rock.

Sin embargo, y en medio de la expectativa generada, en los días previos el festival se vio envuelto en una serie de controversias, polémicas y desprolijidades por la baja de algunos artistas de la grilla -León Gieco, el último y más notorio- aduciendo diferentes y variados motivos: por cuestiones económicas, los casos de Héctor Starc y Los Twist; por decisión de los organizadores, en el caso de Ricardo Iorio, e, incluso, por solidaridad con el cantante metalero, en el caso del grupo Horcas y de Claudio "Tano" Marciello, guitarrista de Almafuerte, la banda que desde hace 20 años lidera Iorio.

Distribuidos a lo largo del amplio predio Malvinas Argentinas, en la Paternal (propiedad del club Argentinos Juniors), tres escenarios, uno cerrado (bautizado Artaud, en homenaje al disco de Pescado Rabioso) y dos a cielo abierto (La Balsa, por el clásico de Los Gatos) y Signos (por la canción de Soda Stereo), albergaron en la jornada de sábado a una notable cantidad de bandas y solistas. A primera hora de la tarde y bajo un sol radiante, Vetamadre, La Mono, Jimmy Rip and The Trip, Sick Porky, La Condena de Caín y Nagual recibieron a los más tempraneros, cada uno con su propuesta: del rock más clásico y de fogón a cierto gusto por lo dark. Pero fue un histórico como Emilio del Guercio quien acaparó la atención de muchos con su reconocido toque melódico y ricos arreglos vocales al servicio de sus temas en plan solista ("Trabajo de pintor", "Sólo por amor"), y de gemas de Almendra y Aquelarre como "Fermín", "Brumas" y "Violencia en el parque", que emocionaron a unos cuantos.

Con las primeras sombras de la noche y secundado por imágenes de cúpulas y torres de antiguos edificios disparadas desde la pantalla led que hizo las veces de telón de fondo, Catupecu Machu envolvió a la audiencia con un set contundente. La suya fue la primera sacudida festivalera, con feroces versiones de "Perfectos cromosomas", "Origen extremo", "Dale!" y "Magia veneno", que se entremezclaron con las participaciones especiales de los invitados, Lisandro Aristimuño y algunos integrantes de Sick Porky. Con el cancionista rionegrino interpretaron "Para vestirte hoy", versión power del tema de Aristimuño, mientras que con los Sick Porky Catupecu arremetió con "El mezcal y la cobra". Para rematarla: un homenaje a The Ramones de la mano de "Blitzkrieg bop".

Mientras Los Gardelitos desataban una verdadera fiesta con su rock contagioso frente a unos fervorosos fanáticos que colmaron el escenario cubierto Artaud, cantando de viva voz todos sus temas y haciendo flamear sus enormes banderas, Celeste Carballo pisó fuerte en el B.A.Rock seteada en modo Janis Joplin y dejando para otra ocasión su habitual costado folk. Esta vez, desde el arranque con "Me vuelvo cada día más loca", todo fue rock'n'roll al mango y mucho blues en compañía de una banda superajustada, un desempeño vocal superlativo y varios pasajes destacados. Como en "Querido Coronel Pringles", "A cada paso", "Queja" y una que conocemos todos: "Es la vida que me alcanza".

Con un flamante álbum grabado en conjunto, Litto Nebbia, en compañía de Pez, asomaba como uno de los puntos más atractivos de esta primera fecha, pero su actuación superó ampliamente todas las expectativas previas. Se suponía que la agrupación liderada por el guitarrista Ariel "Minimal" Sanzo, devota del rock argentino de los setenta, ensamblaría sin problemas con la impronta musical del ex líder de Los Gatos, aunque en vivo esa conjunción fue perfecta, como si se conocieran de toda la vida. Espléndidas y remozadas versiones de "El rey lloró", "Rock de la mujer perdida", "Soy de cualquier lugar" y la fundacional "La balsa" se intercalaron con nuevo material como "Las palabras mágicas" y la incandescente "Hogar". Todo eso antes de homenajear a Moris con "Pato trabaja en una carnicería". Rock, blues y melodías de alto vuelo caracterizaron al set.

Quienes también se mostraron en muy buena forma fueron dos contemporáneos de Nebbia: Alejandro Medina y Ricardo Soulé. En compañía de dos guitarras, una batería y coros femeninos, el ex bajista de Manal desgranó todo su potencial blusero y de hard rock, especialmente en "Tontos" (clásico de La Pesada), "Paraíso perdido" y "Cosmos". Al tiempo que el ex Vox Dei, ahora al frente de su proyecto La Bestia Emplumada, revalidó sus credenciales como cantante, guitarrista y compositor con "Dolmen" y "La luz que creo", e imbatibles pasajes del álbum La Biblia, como "Libros sapienciales I y II" y "Génesis".

Ya con noche bien cerrada y ante una asistencia que, según datos de la organización, alcanzó las diez mil almas, Las Pelotas brindó algo así como un grandes éxitos en vivo casi sin interrupciones y con toda la experiencia que aporta haber participado en infinidad de festivales. Desde un comienzo arrollador con "Saben", "Desaparecido" y "Blancanieves", pasando por el aporte vocal del invitado Fernando Ruiz Díaz en "Si quisiste ver", el show llegó a su clímax con "Bombachitas rosas", "Capitán América" y el bonus de "El ojo blindado", de Sumo.

Uruguaya de nacimiento pero desde hace muchos años jugando de local entre nosotros, La Vela Puerca fue la encargada de cerrar el primer día del B.A.Rock 2017. Y lo hizo con un recorrido por buena parte de su discografía, justo a días de celebrar sus 20 años con la salida de un DVD, Festejar para sobrevivir. Con el apoyo incondicional de su gente, la banda liderada por los "Sebastianes" Teysera y Cebreiro incluyó en su lista de temas canciones como "Soldado de plomo" y "Por la ciudad", además de clásicos imbatibles como "Madre", "El viejo" y "El profeta".

Hoy, tercera y última jornada

El renacido festival B.A.Rock finalizará hoy su edición 2017 con Las Pastillas del Abuelo a cargo del cierre. La banda se presentará en el escenario La Balsa después de Fito Páez, David Lebon, Dancing Mood, Cielo Razzo, De La Gran Piñata y Pampa Yakuza. En el escenario Artaud tocarán Carajo, Eruca Sativa, La Mississippi, Gran Martell, Utopians y El Buen Salvaje, mientras que en el espacio Signos se presentarán Bersuit Vergarabat, Militantes del Clímax, Zona Ganjah, Carca, Claudio Kleiman y Love Paranoia.