
El racismo, autopsias gore y el regreso de Alien definen este trimestre de terror
No pasa semana sin que se estrene algún exponente del género en las salas locales, siempre con buen público; una guía de los mejores títulos que vienen y los directores a seguir
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Entre los grandes tanques de Hollywood dedicados a los superhéroes y aquellos que se proponen contar historias para toda la familia no queda mucho lugar en la cartelera para otros géneros. La comedia, el thriller y el drama adulto que hace un par de décadas se podían ver todas las semanas en las salas ahora son apariciones esporádicas entre los estrenos comerciales. En cambio, el cine de terror -que ofrece el potencial para generar ingresos mucho mayores que su muchas veces exiguo presupuesto- sigue teniendo una representación numerosa en las salas, con ejemplos mejores y peores.
Las películas que llegan a los cines argentinos casi todos los jueves no son homogéneas en sus estéticas y modos de producción. Es decir: no hay "un" cine de terror. Sí hay películas independientes de bajo presupuesto, que suelen depender de su calidad para llamar la atención, como fue el caso de Te sigue, de David Robert Mitchell. También existen producciones de grandes estudios hollywoodenses con conocidas estrellas como protagonistas, que apuestan a campañas de marketing bien planificadas para explotar al máximo su capacidad comercial y continuar los éxitos con secuelas, precuelas y derivados; como sucedió con el hit El conjuro, cuya continuación se consagró el año pasado como la representante del género más taquillera desde 1997 en la Argentina.
Un caso aparte son las películas de Blumhouse, una productora con una impresionante expansión dentro del género. La factoría creada por el productor Jason Blum se caracteriza por tener un buen ojo para contratar directores nuevos y producir en serie películas de terror con presupuestos mínimos. Tuvo grandes éxitos comerciales y críticos, como Actividad paranormal, La noche del demonio y La noche de la expiación, pero también ha producido muchos films de baja calidad. Dentro de los estrenos sobresalientes de Blumhouse de este año se encuentra Huye (Get Out), dirigida por Jordan Peele (del dúo cómico Key & Peele), que con su historia de tensión racial llevada al extremo más terrorífico se convirtió en un suceso de taquilla en los Estados Unidos y llegará a la Argentina el 4 de mayo.

Pero antes de eso, este mes se perfila como uno muy movido para el género. Este jueves se estrenará Nunca digas su nombre, de Stacey Title, protagonizada por Douglas Smith, Lucien Laviscount, Cressida Bonas, Carrie-Anne Moss y Faye Dunaway. La película cuenta la historia de tres estudiantes universitarios que descubren un ente maligno -llamado The Bye Bye Man, tal su título original- que empieza a acosarlos.
El 20 de este mes llegará La morgue, de André Ovredal, con dos actores destacados como Brian Cox (La supremacía de Bourne) y Emile Hirsch (Hacia rutas salvajes), encarnando a un padre y su hijo que trabajan como forenses y se enfrentan a la autopsia de una chica no identificada, que resultará fuera de lo común. El film se presentó en la sección de medianoche del último festival de Toronto y viene con críticas positivas después de su estreno en Estados Unidos.
Otra película que hizo ruido en el festival canadiense -y que se estrenará ese mismo día, un doblete de género que no es infrecuente en las salas porteñas- es Colosal, nuevo film del director español Nacho Vigalondo. En esta combinación de terror, humor y drama, Anne Hathaway interpreta a una mujer que regresa a su ciudad natal después de perder su trabajo y separarse. Lo fantástico irrumpe cuando las noticias muestran que Seúl está siendo destruida por un monstruo gigante y Gloria tiene algo que ver.

Además de estos estrenos comerciales, durante la segunda mitad de este mes se realizará el Bafici, que en su clásica sección Nocturna incluirá varios títulos valiosos, como The Girl with All the Gifts, de Colm McCarthy, un muy original tratamiento del tema zombis, y The Love Witch, de Anna Biller, con estética de los 60 y trasfondo feminista. La sección Rescates también ofrecerá la posibilidad de descubrir o reencontrarse con Suspiria, el clásico del maestro italiano Dario Argento, en flamante versión restaurada, que este año estrenará una remake dirigida por Luca Guadagnino, con Dakota Johnson y Tilda Swinton.
El mes próximo, sin embargo, llegará lo que es quizás el punto más alto del género en 2017: el 18 de mayo se estrenará aquí Alien: Covenant. Esta nueva incursión de Ridley Scott en el universo de esta serie de films de ciencia ficción y terror tiene como protagonistas a Michael Fassbender, Katherine Waterston, James Franco, Noomi Rapace, Guy Pearce, Billy Crudup, Danny McBride y Demián Bichir, y es tanto una secuela de Prometeo como una precuela de Alien, de 1979. El film sigue a la tripulación de la nave colonizadora Covenant, que se dirige a un planeta remoto al otro lado de la galaxia, donde descubrirán que lo que pensaban que sería un paraíso es en realidad un mundo muy peligroso del que deberán escapar.
Los estrenos del género continuarán en junio con La crucifixión, de Xavier Gens, centrada en la posesión demoníaca, uno de los temas predilectos del género; y No toques dos veces, dirigida por Caradog W. James, cuya historia gira alrededor de una leyenda urbana.
Después de la pausa obligada de las vacaciones de invierno las propuestas no se detendrán: en agosto se estrenará Amityville, el despertar, de Franck Khalfoun, producida por Blumhouse y protagonizada por Bella Thorne y Jennifer Jason Leigh, que le dará otra vuelta de tuerca a la historia, inspirada en hechos reales, retratada en el clásico The Amityville Horror (1979) y Annabelle 2: La creación, de David F. Sandberg, secuela del spin-off de El conjuro, que tiene como personaje central a una muñeca poseída. Casi un mes después, el 28 de septiembre, será el turno de It (Eso), esperada adaptación de la novela homónima de Stephen King, dirigida por el argentino Andrés Muschietti, que tendrá a Bill Skarsgärd en el papel del temible payaso Pennywise.
Ya más cerca de Halloween llegará la ¡octava! entrega de El juego del miedo, y para esa fecha seguramente habrá otras novedades de este género que resiste gracias a su público adicto, que le permite seguir siendo redituable.
Taquilla a prueba de sustos
El conjuro 2, de James Wan, no sólo fue la película de terror más taquillera de 2016, sino que también se convirtió en la representante del género que más público llevó a los cines argentinos en la historia, según información de Ultracine. El film, inspirado en hechos reales y protagonizado por Vera Farmiga y Patrick Wilson -como un matrimonio de investigadores paranormales-, tuvo más de un 1.700.000 espectadores en 361 salas. Se ubicó sexta entre las películas más vistas del año último.
Los tres primeros puestos históricos para el cine de terror en la Argentina se los quedó la serie de El conjuro. La primera parte de la serie, estrenada en 2013, fue vista por más de un millón de espectadores en nuestro país y su spin-off, Annabelle, también fue un gran éxito, con 740.000 tickets vendidos en 2014.
En 2016 hubo otras películas del género que también tuvieron muy buenos resultados en la taquilla local. Entre ellas se cuentan No respires, producción norteamericana dirigida por el uruguayo Fede Álvarez; Cuando las luces se apagan, de David F. Sandberg, realizador de Annabelle 2, que se estrenará próximamente; 12 horas para sobrevivir: El año de la elección, de James DeMonaco, y La bruja, de Robert Eggers.





