Mikael Håfström y el terror
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A pesar de haber incursionado en el cine de terror con 1408, adaptación de una novela de Stephen King, que tuvo a John Cusack y Samuel Jackson como protagonistas, Mikael Håfström dice que su decisión de dirigir El rito no tuvo nada que ver con el gusto por este género. "Lo que me atrajo del material fue que no es sólo una película de exorcismo, que no me interesaría, sino que es también un drama sobre crecer, encontrar tu camino en la vida y preguntas importantes como ésas –cuenta Håfström a La Nacion–. Espero que entretenga y también haga que la gente reflexione sobre esas cuestiones."
El director, que creció en un ambiente protestante y con una madre judía, explica que tuvo que investigar para realizar El rito, ya que no sabía nada sobre el tema de los exorcismos. "El libro de Matt Baglio es periodístico y me permitió entender mejor todo este mundo. Como no es una novela, no tiene una línea argumental, así que Michael Petroni, el guionista, tuvo que construir una narrativa que funcionara dentro del marco de esta investigación periodística. Por eso digo que la película está inspirada en hechos reales, en vez de basada en ellos."
Valioso colaborador
En Anthony Hopkins, confiesa el director, encontró un valioso colaborador. "Si trabajás con un gran actor como él, lo alentás para que haga observaciones y agregue cosas que no están en el guión –explica el sueco–. Es un gran colaborador y le gusta ser dirigido. Fue muy dulce con Colin O’Donoghue, porque entiende la dificultad de estar haciendo su primera película y actuando junto con el gran Anthony Hopkins. Lo ayudó mucho a encontrar su camino y tener confianza en él mismo. Es todas las grandes cosas que te puedas imaginar sobre él."
Uno de los desafíos al realizar El rito fue dirigir a un grupo de actores tan diversos como O’Donoghue, la actriz brasileña Alice Braga, Toby Jones, Marta Gastini, Ciarán Hinds y Rutger Hauer. "Tengo distintas formas de encarar el trabajo con los actores, pero no tiene que ver con que vengan de lugares muy distintos, sino con las personalidades –dice Håfström–. Como director tenés que darte cuenta muy rápido de las necesidades específicas que cada actor tiene. Si lo hacés bien, se transforma en un vínculo muy fuerte."
Håfström se confiesa fanático del cine de los años 70, en cuya estética encuentra inspiración a la hora de filmar. "Una película que me encanta por muchas razones es Venecia rojo shocking, de Nicholas Roeg, con Julie Christie y Donald Sutherland –se entusiasma el director–. Es una gran película. Me gusta cómo retrata Venecia. Los años 70 en el cine norteamericano para mí fueron la última gran era cinematográfica."





