Efecto Stranger Things: Hollywood vuelve a apostar por las aventuras familiares

Un grupo de chicos, una aventura, una pizca de nostalgia y un elemento sobrenatural que cambiará sus vidas para siempre. En varios momentos de su historia, Hollywood contó con esta fórmula para conseguir el éxito que siempre persigue. También la utiliza ahora, como lo demuestra el ya indiscutible suceso de Stranger Things. Y todo indica que aunque los focus groups, los algoritmos y las mediciones de audiencia no sean infalibles, la industria audiovisual se aferra a ellos como la tabla de salvación que lleve a sus producciones al primer lugar de la taquilla.

Con un anticipo este jueves, El gran showman, el año que viene estará marcado por el retorno de las películas para toda la familia. Esas historias que tuvieron su última etapa de verdadero esplendor en los ochenta, punto de referencia inevitable y objeto de homenaje constante -y a veces exagerado- de los relatos que buscan conquistar a la mayor cantidad de espectadores posible, empezando desde los más chicos de la casa y llegando hasta los mayores. Un público amplio y comprensivo que, según la receta dorada, debería encontrar en cada película algún punto de identificación inmediato y altamente satisfactorio.

En el pasado estuvieron E.T. ,el extraterrestre, Annie, Tron y Su juguete preferido, todos en la lista de los films más vistos de 1982, así como Los cazafantasmas, Los Gremlins, Karate Kid e Indiana Jones y el templo de la perdición (estuvieron en 1984) y Volver al futuro, Coocon y Los goonies, en 1985.

Un grupo de películas muy diferentes entre sí, pero que coincidieron en sus logros: con relatos emocionantes e imaginativos que celebran a las familias, ya sean las de sangre o aquellas formadas por elección y necesidad, consiguieron unir generaciones frente a la pantalla. Algo que, según parece, los estudios volverán a intentar en 2018. Y justo un poquito antes también.

A Star Wars: los últimos Jedi con su extenso elenco poblado de personajes, criaturas y secuencias que acercan la saga cada vez más al espíritu de Disney -el estudio decano a la hora de producir entretenimiento familiar, que posee los derechos de la historia creada por George Lucas-, pasado mañana Fox le sumará El gran showman, un musical dedicado a la vida de P. T. Barnum, un hombre que nació en la pobreza y que gracias a su buen olfato para el espectáculo y el sensacionalismo creó un show circense con artistas que otros consideraban aberraciones de la naturaleza, menos que humanos y más aptos para estar encerrados que en el centro del escenario que el empresario creó para ellos. Interpretado por Hugh Jackman, el excéntrico y colorido mundo de Barnum que despliega el film, se completa con su esposa, Charity (Michelle Williams), y sus jóvenes hijas Caroline y Helen (Austyn Johnson y Cameron Seely). Un cuento muy parecido visual y auditivamente a un vistoso musical de Broadway que, entre una extravagante secuencia y la otra, no pierde nunca de vista que, al modo de los musicales de la era dorada de Hollywood, su atractivo debe ser multigeneracional y más universal que nunca. Para eso están las niñas, los diálogos sobre la aceptación del otro, la inclusión del diferente y la talentosa actriz juvenil Zendaya, que interpreta a una equilibrista enamorada del joven y apuesto socio de Barnum, Phillip Carlyle, papel a cargo de Zac Efron. Algo para todos los gustos. Al menos en teoría.

Con el nuevo año, la tendencia promete afirmarse. El 4 de enero se estrenará Jumanji: en la selva, una suerte de continuación de aquella aventura de 1995 protagonizada por Robin Williams, que interpretaba a Alan Parrish, el chico que se pasó años atrapado en la jungla por culpa de un vívido juego de mesa. Que ahora, en la secuela, se transformó en un viejo videojuego en el que quedan encerrados cuatro adolescentes muy diferentes entre sí y que lo serán aún más cuando asuman las formas de los avatares del juego que encarnan Dwayne "The Rock" Johnson, Jack Black, Kevin Hart y Karen Gillan.

En febrero, la pelea por la atención de toda la familia tendrá como gran contendiente a Paddington 2, la segunda parte de las aventuras en Londres del oso de peluche más británico que el té de las cinco. Con una ternura insuperable y el humor que aportan grandes actores como Hugh Grant, Hugh Bonneville, Brendan Gleeson y Sally Hawkins, entre otros, la película intentará demostrar que nunca se es demasiado grande ni demasiado cínico para emocionarse con la historia de un personaje que ve siempre el mejor lado de todo y todos. Aunque se trate de un oso, claro.

En los últimos años, cuando se piensa en contenidos para toda la familia, lo primero que viene a la mente de los pacientes padres son las películas animadas. Con vocación de gigantes de la taquilla, muchos de esos films consiguen espectadores de todas las edades aunque su público cautivo sean los más chicos. Esos que en las películas familiares con actores suelen aparecer como los héroes indiscutidos de la historia. Un recurso narrativo que, como quedó clarísimo con Stranger Things, nunca pasa de moda.

Así, en marzo se estrenará Un viaje en el tiempo, una aventura basada en la novela de Madeleine L'Engle que tiene como protagonista a Meg Murry (Storm Reid), una nena que al mismo tiempo que se entera de la desaparición de su padre científico (Chris Pine) también descubre que solo ella podrá rescatarlo con la ayuda de tres misteriosos seres, interpretados por Reese Witherspoon, Oprah Winfrey y Mindy Kaling, que la mandarán en una misión al espacio junto a un amigo y su hermano menor.

Más adelante en el año, en noviembre, otra niña llegará al rescate cuando se estrene El cascanueces y los cuatro reinos, una película de Disney inspirada en el cuento clásico de E. T. A. Hoffmann -que a su vez inspiró al ballet El cascanueces- protagonizada por Mackenzie Foy como Clara, la nena cuya curiosidad la lleva a un mundo fantástico poblado de excéntricos personajes que interpretarán Keira Knightley, Helen Mirren, Morgan Freeman y la bailarina Misty Copeland.

Para esa misma época se estrenará la segunda parte de Animales fantásticos y dónde encontrarlos, un nuevo viaje por el mundo creado por J. K. Rowling, aunque la acción transcurra, otra vez, muchos años antes del nacimiento de su hijo más pródigo: Harry Potter.

Y en diciembre, para cerrar el año del regreso de las películas familiares, volverá uno de sus personajes más famosos: Mary Poppins. Anunciado para la Navidad de 2018, el film retomará la historia de la misteriosa niñera que volverá a Londres, ahora durante la Depresión, para visitar a aquellos niños Banks del film original, que ahora ya son adultos pero siguen necesitándola tanto como ese día en que, literalmente, aterrizó frente a su puerta. Con Emily Blunt como la mágica Mary Poppins, la película cerrará como ninguna otra habría podido el año en que el cine volvió a probar el tamaño familiar.

Las claves de la tendencia

1) Stranger Things

El éxito de la serie de Netflix confirmó que los contenidos familiares todavía funcionan.

2) Star Wars: Los últimos Jedi

Producida por Disney, la película presenta a los tiernos Porgs, unas criaturas listas para ser incorporadas en el merchandising de la saga.

3) Animales fantásticos y dónde encontrarlos 2

En el regreso al universo de los magos, Newt Scaramander (Eddie Redmayne) se cruzará con el malvado Gellert Grindelwald (Johnny Depp).

4) Paddington 2

Vuelve el tierno oso de peluche y esta vez se tendrá sus aventuras lo llevarán tras las rejas.

5) El cascanueces y los cuatro reinos

Llega una nueva versión del conocido ballet a la gran pantalla.

6) Mary Poppins Returns

Emily Blunt interpreta a la niñera mágica que hizo famosa Julie Andrews en el film de 1964.