El hollywoodense funeral de Joan Rivers: risas, stand up y un solo de Hugh Jackman

Joan Rivers, quien murió el jueves pasado a los 81 años, era una persona irreverente y los años le dieron a esta cómica y conductora aún más impunidad para bromear y decir cualquier barbaridad que se le ocurriera de todas y a cada una de las celebridades de la moda y del cine. No obstante, ayer, en su funeral, desfilaron muchas personalidades que le rindieron homenaje en una ceremonia a su medida, con mucho humor, risas y hasta un show a lo Broadway por parte de Hugh Jackman y entre otros.

Entre los presentes, estuvieron los diseñadores de moda Dennis Basso, Michael Kors y Carolina Herrera; los magnates Barry Diller, Donald Trump y Steve Forbes; y famosos de Hollywood como el músico Paul Shaffer, Whoopi Goldberg, Sarah Jessica Parker, Matthew Broderick, Barbara Walters, Kathy Griffin y Rosie O'Donnell.

Así, muchas celebridades acompañaron a la hija de Rivers, Melissa, y a Cooper, nieto de la cómica, durante el servicio religioso privado que tuvo lugar en la sinagoga Temple Emanu-El, ubicada sobre la Quinta Avenida, en Nueva York. Sólo se podía concurrir al servicio por invitación, por lo que la Policía cerró las calles laterales. Esto permitió que se conforme una especie de alfombra roja o pasillo vallado por donde ingresaban los famosos que eran esperados por paparazzi, cámaras de tevé, periodistas y fans.

Un funeral glamoroso

La ceremonia comenzó con el coro New York City Gay Men's Chorus, que incluyó éxitos de Broadway. Luego, Audra McDonald, seis veces ganadora del premio Tony, cantó su tributo a Rivers. Por su parte, Jackman cerró con "Quiet Please, There's a Lady On Stage" y gaiteros del departamento de policía de la ciudad de Nueva York tocaron en la calle mientras los familiares salían del templo muy emocionados.

En tanto, Howard Stern realizó un monólogo que comenzó con un chiste un tanto fuerte, sólo para adultos. Luego, fue el turno de los discursos, entre los que no día el de su adorada hija, Melissa.

"A ella le habría encantado esto. La única persona que realmente habría pensado que esta ceremonia es "lo mejor del mundo", es la dama que hoy ya no está entre nosotros'', dijo la presentadora de televisión, Deborah Norville.

En su libro, "I Hate Everyone... Starting With Me" ('Los odio a todos, empezando por mí misma), Joan describió cómo debería ser su propio entierro: "Como un enorme acontecimiento, muy tipo show business, con luces, cámaras y acción. Es la última gran presentación, el tercer acto, el número de las 11 en punto. Si te vas a morir, que sea interesante. ¿Hay algo peor que una muerte aburrida? No lo creo''. Esas frases fueron reproducidas en el programa fúnebre. Sin lugar a duda, su funeral fue memorable...