El multifacético más inquieto

Francisco Ruiz Barlett llega a la entrevista con la mochila cargada. Trae libros y discos que muy pronto pone sobre la mesa. "Te llevás todo el merchandising", bromea. Hay una novela y otra edición muy singular que incluye textos, ilustraciones y partituras firmada por un álter ego que inventó y usó también en sus exploraciones musicales: Roberto Planta, una referencia obvia, pero también arbitraria, al famoso cantante de Led Zeppelin, una banda que Ruiz Barlett ha escuchado, pero de la que no es un fan rabioso. Su primer libro, Día VII, apareció en 2008 y él lo define como "una especie de vómito literario". Su padre estaba muy enfermo y necesitaba hacer catarsis: "Depuré toda la información ahí, la largué sin un orden específico. Es un libro anárquico, que tiene también un trabajo importante de diseño gráfico. Siempre me gustó escribir sin atarme a nada, lo hago como cuestión lúdica", explica. La novela, titulada 7 segundos, tiene un prólogo en el que un cuentista descubre que los personajes de sus ficciones, de repente, cobran vida: "El tipo tiene 80 años y decide avisarles a esos personajes que él es su creador. Uno de los personajes no acepta que todo su sufrimiento sea culpa del autor y quiere matarlo. Es un libro que empecé a escribir hace mucho, en 2004, y del que estoy muy orgulloso", asegura. "A mí el arte me llegó más por necesidad que por elección. Cuando estaba empezando la escuela secundaria, me di cuenta de que era sensible por demás. Eso me sirvió para sacar de adentro algunas cosas que se estaban acumulando y que no beneficiaban a mi salud psíquica", agrega Ruiz Barlett, convencido de que "en materia artística, el principio a seguir es la práctica, más que la teoría".

El escenario

Anteayer se estrenó en el Apolo (Corrientes 1372) El otro lado de la cama, adaptación teatral de un film español, dirigida por Manuel González Gil en la que Francisco comparte elenco con Gimena Accardi, Sofía González Gil, Sofía Pachano, Benjamín Rojas y Nicolás Vázquez. David Serrano (también autor y director de un gran éxito del cine español, Días de fútbol) escribió el guión original de la película de Emilio Martínez-Lázaro que, en 2002, protagonizaron dos actores argentinos: Ernesto Alterio y Natalia Verbeke. "Todo se dio gracias al éxito de Te quiero hasta la luna, una obra de Matías Puricelli que protagonicé con Sofía González Gil, que ya va por la sexta temporada. Nos llamaron para estrenarla en Mar del Plata y nos fue muy bien. Compartíamos el teatro con obras en las que estaban figuras como Ricardo Darín, Mónica Ayos y Raúl Taibo. Fue una experiencia bárbara, y yo gané el premio Estrella de Mar a la revelación masculina -dice-. Una noche vino Gimena Accardi y salió fascinada. Después volvió con Nico Vázquez y él también se entusiasmó. Nos contaron que estaban con el proyecto de hacer El otro lado de la cama y ahí unimos fuerzas. Es una comedia divertida sobre los vínculos de pareja: la fidelidad, la infidelidad, también la amistad... Y tiene un condimento especial: unas cuantas canciones clásicas del rock nacional («Me gusta ese tajo», de Pescado Rabioso; «Tirá para arriba», de Zas; «A rodar mi vida», de Fito Páez; «Hace calor», de Los Rodríguez) que van apareciendo a lo largo de la historia. Los temas los arregló Martín Bianchedi y quedaron geniales. Yo soy Rafa, un taxista que es el estereotipo del macho argentino, el que se las sabe todas. Es un personaje que le aporta mucho humor en base a estereotipos muy comunes que todos conocemos. Un personaje opuesto a mi verdadera forma de ser, digamos."

También está en cartel, en Villa Carlos Paz, El club de los estafadores, una obra que Ruiz Barlett escribió con Puricelli y Rubén Leirbag, dirigida por Daniel Casablanca y con Georgina Barbarossa, Diego Reinhold, Gastón Ricaud y Roberto Catarineu en el elenco. "Es una comedia de enredos, al estilo Neil Simon. Hay un personaje jujeño que hereda un millón de dólares y tiene que venir a cobrarlos a Buenos Aires, donde un abogado inescrupuloso que interpreta Reinhold intenta robarle la plata. Es un trabajo impresionante de Diego, y la obra tiene un final inesperado que obviamente no puedo adelantar." Por si todo esto fuera poco, en marzo volverá a la cartelera El espejo (dime qué ves), otra obra que su socio Puricelli escribió en base a textos del misterioso Roberto Planta que inventó Ruiz Barlett, autor además de la música original de la pieza, que pasó antes por el Teatro de la Comedia y Ciudad Cultural Konex.

Por Alejandro Lingenti

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