Humberto Tortonese explicó su polémico look para los Martín Fierro 2014

Después de cuatro años de estar ausente y de haber sido considerado "persona no grata" por Aptra luego de un chiste sobre el escenario, Humberto Tortonese volvió este año a participar de la ceremonia de entrega de los Martín Fierro 2014 y su paso por la alfombra roja no pasó inadvertido: lució una camisa blanca que tenía una llamativa mancha de sangre en el cuello.

-¿Por qué volviste a los Martín Fierro?

-Yo había dado por finalizadas mis idas al Martín Fierro, después que pasó aquello que dijeron que fue un escándalo. Fue por lo que le dije a Susana que le molestó más al resto que a ella. Y todo está tan involucionado hoy en la televisión, ya no nos podemos reír de lo que nos reíamos antes. Por ejemplo, el caso de Virginia Lago. Eso era la burla de "Boluda total". Cómo una mujer que tiene una gran trayectoria como actriz termina tomando un cafecito... Ella misma comiéndose el personaje de boluda que es tremendo. ¿Todo por qué? Porque la señora en la casa quiere, porque da rating. Entonces, si tenés rating siendo un boludo, tenés que ser un boludo. Y los Martín Fierro terminaron siendo eso. Los hacen ir a los Casi Angeles de trajecito... Pibes modernos que no pueden ir vestidos como quieren. ¡A Sebastián Ortega lo criticaban porque iba con su look de zapatillas! Hasta Pettinato estaba formal. Es muy aburrido... Los discursos, todo.

-¿Y cómo se te ocurrió armar ese look?

-Bueno, a nosotros nos habían echado de la radio y se me ocurrió hacer una camisa con sangre chorreando del cuello como que me habían cortado el habla. Se lo propuse al artista Celedonio Lohidoy para que me ayude y me dijo: "Me encanta". Lo hicimos con pintura roja y le pusimos unas moscas que él tenía.

-¿Pensás que la gente entendió el significado?

-No sé, que lo interpreten como quieran.

-¿Cómo quedaron las cosas con Rock and pop?

-Estamos ahí, viendo si cobramos. Fue todo muy desprolijo, echarnos así después de quince años. Las cosas se tenían que hacer de otra forma. Pergolini era un par nuestro y nunca apareció para decirnos nada. El tendría que haber llamado a la Negra y decirle "pasa esto".

-¿Te desilusionó Pergolini?

-Sí, totalmente. Cuando vos tenés una amistad con alguien no podés no hablarle nunca más para irte detrás de la guita.