“Mi pobre angelito” cumple 30 años: la anécdota real que inspiró la película más inolvidable de la Navidad

"¿Quién sos?", pregunta Macaulay Culkin, entonces de siete años, asustado. "Soy tu tío Buck", le responde John Candy, mientras cocina el desayuno. El diálogo apareció en la película apropiadamente llamada Uncle Buck (Tío Buck al rescate en Hispanoamérica), una comedia de 1989 sobre un hombre irresponsable que debe encargarse de sus tres sobrinos luego de que su hermano sufre un ataque al corazón.

Si bien la cinta no convenció en su tiempo a los críticos, se presentó como un moderado éxito en los cines con casi 80 millones de dólares de recaudación. Pero quizás la mayor contribución de la cinta es que inspiró a su director John Hughes (1950-2009) a escribir una de las cintas navideñas más famosas de todos los tiempos: Mi pobre angelito. En honor al 30 aniversario del estreno de la película este 10 de noviembre, revisamos el origen de este clásico navideño.

Todo comenzó con Macaulay Culkin

"Cuando estábamos filmando Uncle Buck nos divertimos mucho con un niño (Culkin). Nunca había trabajado con alguien de esa edad", recordó el realizador en una entrevista televisiva.

En ese entonces, Hughes era uno de los directores y guionistas más exitosos de Hollywood. Había empezadosu trabajo como el escritor de Vacaciones (1983) y siguió con proyectos que redefinieron lo que era la comedia juvenil con clásicos como Se busca novio (1984), El club de los cinco (1985), Ciencia loca (1985) y Un experto en diversiones (1986).

En cambio Culkin estaba muy lejos del estrellato por el que se lo reconoció en los años '90. Aunque comenzó temprano en la actuación, antes de Tío Buck al rescate solo había participado en un par de películas para televisión y en papeles secundarios en filmes como El cohete de Gibraltar (1988) y Amores compartidos (1989). Su excelente actuación junto a Candy convenció a Hughes que estaba frente a un niño que podía protagonizar una película.

La escena de Tío Buck al rescate que inspiró a Mi pobre angelito ocurre cerca del clímax de la película, cuando el tío Buck (Candy) va en búsqueda de su rebelde sobrina Tía (Jean Louisa Kelly), y le pide a su novia Chanise (Amy Madigan) ayuda para cuidar de los otros dos pequeños en casa. Pero ingresar a la casa no será nada fácil para la mujer y sus acompañantes, con el personaje de Culkin confundiéndolos con un grupo de ladrones e interrogándolos a través de la ranura para correo, utilizando un ingenio y precocidad que luego fue característica del personaje de Kevin McAllister.

Una idea millonaria

Convencido de la posibilidad de realizar una cinta protagonizada por un niño, todavía faltaba el tema central en torno al cual giraría. La idea de la película le vino a Hughes un 8 de agosto de 1989, antes de salir en unas vacaciones familiares a Europa. "Me iba de vacaciones y escribí una lista de todo lo que no me quería olvidar. Y pensé ‘bueno, mejor no me olvido de mis hijos’. Después se me ocurrió ¿qué pasaría si dejo a mi hijo de 10 años en casa? ¿Qué haría él?", relató Hughes.

A raíz de esta idea Hughes escribió ocho páginas de notas, imaginando qué haría un niño en tales circunstancias. Dos semanas después, de vuelta en casa, empezó a escribir durante los siguientes nueve días lo que sería el primer borrador de la película, en total un guion de 44 páginas.

Entra Chris Columbus

Si bien Hughes fue el autor intelectual de la película, esta no existiría sin Chris Columbus. Aunque ahora es reconocido como el director de títulos como Papá por siempre (1993), El hombre bicentenario (1999) y las dos primeras películas de la saga de Harry Potter, en ese entonces él era más famosos por sus guiones de cintas como Gremlins (1984) y Los Goonies (1985). Al momento en que fue contactado por Hughes, Columbus solo había dirigido dos películas: la mediocre Una noche por la ciudad (1987) y la críticamente vapuleada Heartbreak Hotel (1988). El fracaso de esta última fue tal que el realizador pensaba que su carrera en Hollywood había terminado.

"En 1988, había dirigido Heartbreak Hotel y fue un desastre. Fue estrenada en un viernes y para el miércoles solo la proyectaban a las dos de la tarde. En ese tiempo, Hughes me mandó el guion para Vacaciones de Navidad (1989). Amo la Navidad, así que hacer una comedia navideña era uno de mis sueños", rememoró Columbus en un artículo de la revista Chicago en 2015.

Sin embargo, una mala relación con Chevy Chase, la estrella de la película y personaje difícil de la farándula, conllevó a que Columbus terminara por abandonar el proyecto. "Llamé a Hughes (quien producía el film) y le dije: ‘No hay manera que pueda hacer la película. Sé que necesito el trabajo, pero no puedo hacerlo con este tipo’. Hughes fue muy comprensivo. Dos semanas después, recibí dos guiones. Uno era de Mi pobre angelito con una nota de Hughes sobre si quería dirigirlo", agregó.

Columbus no modificó mucho el guion de Hughes, aunque sí realizó un cambio importante a la historia al incluir a Marley, el aparentemente aterrador vecino de Kevin (interpretado por Roberts Blossom) que termina ayudándolo en el clímax de la película. El hecho que Kevin finalmente logra que Marley se reencuentre con su propia familia también refuerza los temas de los lazos familiares y el perdón, dándole un impacto más emocional a la historia.

La colaboración entre Hughes y Columbus se convirtió en uno de los mayores éxitos de 1990, solo debajo de las cintas románticas Ghost: la sombra del amor (1990) y Mujer bonita (1990) en recaudación de taquilla. También convirtió a Macaulay Culkin en la mayor estrella juvenil del momento, presentando una fama que hasta ahora es difícilmente comparable. Esta fórmula ganadora se repitió dos años después en Mi pobre angelito 2: Perdido en Nueva York (1992) que transportó la acción de Chicago a la Gran Manzana y ahora Disney+ espera capturar nuevamente la magia con un remake con Archie Yates (Jojo Rabbit) en el papel protagónico y Dan Mazer (Mi abuelo es un peligro) en la silla del director.

Cabe señalar que la producción de la película original es igualmente fascinante, en particular la manera en que 20th Century Fox terminó por quitarle este éxito a Warner Bros., cuestión que el estudio probablemente se lamenta hasta la fecha.