El varón del tango, en el recuerdo

Para conmemorar los 80 años del nacimiento de Julio Sosa, hoy, a las 23, el canal Volver emitirá un programa especial editado hace algo más de un lustro donde se le rindió tributo al cantor de tango con un completo informe.

El material cuenta con el testimonio de familiares y músicos como Osvaldo Montes, Alberto Podestá, José Colángelo y Leopoldo Federico. Además, incluye imágenes de sus actuaciones en el cine y la TV y de la multitudinaria despedida que le hicieron sus seguidores tras su trágica muerte, en un accidente automovilístico.

Por su temprana elección del género musical con el que se hizo famoso y por su fuerte temperamento y caudal vocal al momento de cantar, este uruguayo, nacido en 1926 en la localidad de Las Piedras, ganó el apodo de "el varón del tango".

Pasó por varios oficios mientras daba sus primeros pasos como intérprete. Primero se hizo escuchar en su pueblo natal, luego en Montevideo y más tarde, en 1949, cruzó el Río de la Plata para conseguir un lugar en la escena tanguera porteña. En Buenos Aires comenzó como solista, luego pasó por la orquesta de Francini-Pontier y la de Francisco Rotundo, y hacia fines de los cincuenta volvió a su labor en solitario acompañado por una agrupación liderada por Leopoldo Federico.

En aquellos años en los que los jóvenes comenzaban a prestarles atención a otros géneros, Sosa fue uno de los más populares representantes de la resistencia tanguera.

El cantor registró varios discos para las principales casas disqueras, publicó un libro de poemas -"Dos horas antes del alba"- y llegó a la pantalla grande con una participación en la película "Buenas noches, Buenos Aires" (dirigida por Hugo del Carril y estrenada poco antes de la muerte de Sosa).

Su vida se la llevó otra de sus pasiones, el automovilismo, cuando tenía, apenas, 38 años. Apasionado por la velocidad, durante la madrugada del 25 de noviembre de 1964 chocó contra una baliza luminosa ubicada en la avenida Figueroa Alcorta.

Fue internado, pero no sobrevivió al accidente.

El título de "varón del tango" salió de la oficina de una compañía discográfica, pero su público se encargó de confirmar ese nombramiento en la manera en que siguió su carrera artística y, tras el accidente, con un velatorio que se realizó en el Luna Park (por la gran cantidad de gente que quería despedirlo) y un cortejo fúnebre que tardó seis horas en llegar al cementerio.

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