Un grupo que también es familia
Francisco, Hugo y Osvaldo presentarán esta noche su disco grabado en vivo
1 minuto de lectura'
Uno de los emblemas musicales del Río de la Plata es la familia Fattoruso, que, en los tempranos 60, ya subía al escenario. Eran otros tiempos, otra formación y otra música; sin embargo, este clan ha mantenido la calidad artística.
En la actualidad, el trío Fattoruso -con Hugo en teclados y voz, Osvaldo en batería y Francisco (hijo de Hugo) en bajo- se ha convertido en un combo que trasciende en lo estilístico la región para convertirse en una suerte de faro musical que de una orilla a otra del Río de la Plata ilumina el camino.
Su música está atravesada por la electricidad y posee un raro encanto entre lo moderno y lo clásico; dos generaciones absolutamente demarcadas por la forma de transmitir sus influencias. Una propuesta que tiene candombe, canciones y también un rock duro, percusivo.
El trío Fattoruso presentará hoy, a las 23, en La Trastienda, su trabajo "Trío Fattoruso en vivo, en Medio y Medio", editado por Los Años Luz. La minigira de los Fattoruso seguirá el sábado, en Córdoba, y el domingo estarán en el Festival de Jazz de Junín.
Casi tres años sin presentarse en Buenos Aires debido a la partida de Francisco Fattoruso a los Estados Unidos para seguir allí su carrera. De paso por Buenos Aires hacia Montevideo, LA NACION charló con este músico, uno de los jóvenes más talentosos que tiene la música rioplatense y que viene desarrollando en el Norte una actividad tanto musical como de producción discográfica.
Francisco ha sido clave en el desarrollo del trío, pues a partir de su influencia el grupo tomó un sendero que lo llevó hacia nuevas fronteras; en particular, parece haber acercado una mirada del rock moderna a la música de esta familia, tan consustanciada con Montevideo.
Para Fattoruso la evolución del trío es parte de su propia evolución. "Comencé a los 19 años con Hugo y Osvaldo [hasta ese momento formaba parte del grupo Illya Kuryaki and The Valderramas] y fui creciendo con ellos. Estudio mucho, actúo y trabajo full time en la música; así fui adquiriendo la madurez que no tenía. Pensá que ellos ya eran músicos maduros antes de que yo naciese, es decir, intento todo el tiempo acercarme a su nivel", explicó este músico que tiene en su mochila un proyecto de rock que debió dejar en Montevideo y que ahora piensa reflotar en los Estados Unidos.
El grupo reunido debutó el 4 de noviembre de 1999, en Tobago. Francisco contó que venían de una historia de distancias entre Hugo y Osvaldo, que poco a poco se fue resolviendo. "La separación de Osvaldo de su mujer en aquel tiempo permitió un acercamiento con Hugo que llegó rápidamente al campo de la música y fue así como pudimos construir el trío", dijo.
Burlando al tiempo
Una historia muy fuerte con los Shakers y con Opa comenzaba, nuevamente, a gestarse a través de esta reunión. Sus primeros shows demostraron que el tiempo no pasa para esta familia que parecería venir de tocar ayer y, sin embargo, habían pasado diez años separados. Es que es un trío, pero también es una familia.
La música que proponen hoy fluctúa entre momentos casi de rock sinfónico, con otros salvajes procesos de improvisación y ciertos remansos de candombes y canciones, pequeñas joyas que Hugo rescata del olvido y del tiempo.
El trabajo que presentarán tiene la mitad de los temas de Francisco. Sobre este punto, el músico señaló que el disco está captado durante una actuación en vivo en Punta del Este y que es puramente aleatorio que figuren cinco temas de él. "Hicimos música como para dos discos, pero se iba a editar solamente uno. Elegimos, entonces, los que mejor habían quedado; el disco tiene poca edición y no quisimos «pinchar» [en el argot significa que no hubo correcciones de estudio] ningún tema. Quedó lo que consideramos mejor", sostuvo el bajista.
Francisco es un músico que ha crecido como instrumentista y ha logrado desarrollar un estilo que sugiere una combinación entre bajistas como Scott LaFaro y Jaco Pastorius, no tanto por la forma de interpretar sino por su relación con los solistas y en el armado del trabajo colectivo.
Hasta la edición en vivo del disco que presentarán hoy, sobre el Trío Fattoruso pesaba una suerte de maldición. "Nos costó mucho tener un disco. Inicialmente, hicimos uno muy doméstico, que solamente salió en Uruguay. Después grabamos dos, uno en el estudio Circo Beat que se iba a llamar «Brainstorming» y que lo tiene el productor neoyorquino Neil Weiss. No sé qué quiere para editarlo. Pienso que esa música es nuestra; Weiss ni siquiera contrató el estudio ya que Fito Páez nos lo prestó a nosotros. «Brainstorming» debería ser editado, voy a intentar recuperarlo", dijo Francisco.
Francisco se acaba de mudar con su mujer e hijo de Virginia a Atlanta, donde está trabajando con un grupo gospel de una congregación. "No soy parte de esa creencia, toco con ellos y la verdad que suena tremendo. Es un trío instrumental y un coro de 25 cantantes", comentó.
Respecto de su proyecto, comentó que está en una etapa de rearmado, en parte por la mudanza. "Hasta que me inserte más en esa ciudad sigo con trabajos de músico free-lance y componiendo mi música, que es rock", concluyó Francisco Fattoruso.
Para agendar
- Trío Fattoruso . Presentará su disco en vivo.
La Trastienda Club . Balcarce 460. Hoy, a las 23. Entradas, desde 15 pesos.

