Dylan Farrow habló sobre los abusos que sufrió por parte de su padre, Woody Allen

En febrero de 2014, Dylan Farrow decidió que había permanecido en silencio durante demasiado tiempo: a través de una carta abierta publicada por The New York Times, la hija de Mia Farrow y Woody Allen habló en primera persona sobre los abusos que sufrió en su infancia por parte de su padre.

Como contrapartida, el director de Blue Jazmin salió a negar rotundamente el asunto y apuntó contra su ex mujer como responsable de orquestar una injuriosa campaña en su contra. Vale recordar que el matrimonio de Allen y Farrow terminó de manera escandalosa en 1992, cuando la actriz descubrió que su esposo estaba manteniendo un romance con Soon-Yi, una de sus hijas adoptivas. La justicia, en tanto, desestimó la denuncia por considerar que no había pruebas suficientes como para culpabilizarlo.

Aún cuando la carta abierta hizo mucho ruido mediático por algunas semanas, Allen siguió estrenando películas -a razón de una por año, como es su costumbre- y nadie en Hollywood se mostró demasiado incómodo como para rechazarle al realizador una propuesta laboral. Por el contrario, trabajar bajo sus órdenes continuó siendo una suerte de honor o privilegio al que sólo unos pocos podrían acceder.

Pero la fuerza que tomó el movimiento #MeToo y Time's Up en los últimos meses cambió rotundamente el panorama. Así, varios actores se mostraron tardíamente arrepentidos de haber trabajado con alguien acusado de haber atacado sexualmente su hija adoptiva, y hasta algunos -como Rebecca Hall y Timothée Chalamet- decidieron donar sus salarios hacia organizaciones que defienden a las víctimas de abuso.

Entonces, Dylan comprendió que era un buen momento para volver a contar aquello que ya había contado, aunque esta vez de frente a una cámara. Y así lo hizo, en una entrevista que el programa This Morning de la cadena estadounidense CBS puso al aire esta mañana.

"Quiero mostrar mi cara y contar mi historia. Quiero hablar con la verdad. Amo a mi padre, lo respeto y él era mi héroe. Eso, obviamente, no lo excusa de lo que me hizo, pero hace que duela más intensamente", contó la mujer, de 32 años.

Durante la entrevista, Dylan se refirió puntualmente a los hechos ocurridos el 4 de agosto de 1992, cuando Allen ya no convivía con ellos pero llegó hasta su casa para visitarlos. "Estaba en el desván, en la casa de campo de mi madre en Connecticut, cuando él me pidió que me tirara boca abajo y jugara con el trencito de mi hermano, se sentó detrás mío y me atacó sexualmente", recordó. En aquél momento, ella tenía apenas 7 años.

"Recuerdo que dije que me había tocado mis partes privadas, él tocó mi vagina con sus dedos. Mi madre se había ido de compras ese día. Cuando se enteró, se puso muy triste; mi primer impulso fue sentir que había hecho algo mal", explicó, notablemente conmovida.

También, Dylan expresó su frustración por el modo en que su palabra fue desestimada a partir de la defensa -con mucho de contraataque- esgrimida por el director. "Lo que no entiendo es cómo esta historia de que me lavaron la cabeza y fui coacheada [por su madre, supuestamente "despechada" por el affaire de su pareja con su otra hjia adpotiva] puede ser más creíble que yo contando que fui atacada sexualmente por mi padre", apuntó. "Mi madre siempre me insistió en que dijera la verdad. Pero él miente y ha estado mintiendo por tanto tiempo. Es difícil para mí verlo y escuchar su voz".

Durante la entrevista, Dylan insistió en que esa no fue la única vez que Allen tuvo una actitud inapropiada con ella. "Siempre me abrazaba y no quería que me aparte", dijo. "Me decía que me acostara con él cuando estaba en ropa interior, e incluso lo hacía cuando yo estaba en ropa interior".

Woody Allen ante las denuncias de su hija adoptiva, Dylan Farrow