Separado de Pampita, Pico Mónaco se concentra en el golf

Cuando le dijo adiós al tenis, en mayo de 2017, Pico Mónaco (34) sabía que tenía que tomar las decisiones correctas para no arrepentirse. Es que el tenis había sido el motor de su vida desde que era chico y conocía muchas historias de deportistas de élite que, alejados de la alta competencia, se enfrentaron a un vacío que no supieron llenar. Así que él hizo dos cosas: empezó a trabajar en televisión, un desafío que lo obligó a aprender los códigos de un mundo nuevo y a estar atento y concentrado, y no volvió a pisar una cancha de tenis para no tentarse con la posibilidad del regreso.

Recién ahora, casi dos años después, siente que el tenis profesional es pasado y se permitió agarrar de nuevo una raqueta para divertirse. Y también se dio el gusto de empezar a aprender a jugar al golf, una asignatura pendiente. "Arranqué hace poco, pero es algo que siempre tuve intenciones de hacer. Siento que es un deporte que se puede practicar toda la vida, relajado, que ayuda a conectarse con uno mismo –contó–. Tomo clases tres o cuatro veces por semana con Manu Peluffo, que es mi amigo y un profesional del golf. Eso sí: estoy aprendiendo contrarreloj, porque unos amigos de Mar del Plata me apostaron que no tenía ninguna chance de ganarles para fin de mes. Fue lo peor que pudieron haber hecho, porque soy muy competitivo y me lo tomé como un desafío".

Y, motivado por la provocación de sus amigos y su pasión por el deporte, el ex tenista se tomó muy en serio su hobby y el segundo día logró jugar 9 hoyos. "Soy consciente de que es difícil mejorar, pero tengo muchas ganas de aprender y lo hago con disciplina. Y creo que mi experiencia como tenista me va a servir bastante con el golf, porque son dos deportes a los que les encuentro muchas similitudes", agregó Pico.

PICO SE CUIDA

Aunque no sigue una rutina física y alimentaria tan estricta como cuando competía en el circuito ATP, tiene algunos secretos para mantenerse en buena forma. Y un par de permitidos:

• No toma gaseosas, no come fritos ni lácteos.

• Hace entrenamiento funcional.

• Juega al tenis o al paddle dos o tres veces a la semana.

• Toma clases de golf.

• Sólo se da permiso para disfrutar de una cerveza artesanal o una copa de vino cada tanto.