
Top Five: los personajes de series cuyas muertes más lloramos
Con motivo de la triste partida de Pedro de Farsantes, repasamos otras dolorosas despedidas televisivas; atención: ¡esta nota tiene spoilers, pero no de series actuales!
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Parece que hoy en día lo peor que le puede pasar a una serie es la carga viral con la que se promociona, discute, difunde. ¿Por qué lo peor? Mejor dicho, ¿por qué es lo menos conveniente? Por la sencilla razón de que para quienes quieren ponerse a ver un programa, la tarea de aislarse de los spoilers es prácticamente titánica. Por lo tanto, en este nuevo Top Five, recordamos algunas de las muertes de personajes de series que más nos dolieron, sin fijar la mirada en producciones actuales. Sin embargo, quienes tampoco quieran enterarse de ellas, están advertidos de no proseguir con la lectura…
*1. JEN LINDLEY (Dawson’s Creek)
Vamos a darle la derecha a Kevin Williamson: desde el comienzo que el personaje de Jen fue presentado como el más atípico de su serie, el más unívocamente considerado problemático, el más atractivo y pluridimensional. Por ende, no podía correr con la misma suerte que el resto. Sin embargo, su destino trágico fue, cuanto menos, innecesario, especialmente teniéndolo a Dawson como posible "material de descarte" ya que era, por lejos, la figura que menos aportaba a la serie. Jen pasó, a través de las temporadas, por los más disímiles estadios. La bomba sexual que revolucionaba Capeside. La amenaza para Joey Potter. La joven adicta en recuperación. La mamá soltera. Cuando encuentra la estabilidad junto a su hija, cuando encuentra en Jack al hermano que nunca tuvo, Jen muere como consecuencia de complicaciones cardíacas. Williamson, de paso, echa sal a la herida mostrándonos un triste video en el que el personaje se despide de sus amigos, familia y (por extensión) de los espectadores, y a partir del cual Michelle Williams ya demostraba su incipiente talento. ¿Algo más? Sí: Jen muere abrazada por "Grams", su abuela, con quien conformó una de las relaciones más duras y emotivas de Dawson's Creek. Demasiado.
*2. MAUDE FLANDERS (Los Simpson)
En ningún Top Five que aborde este tópico puede faltar la extraordinariamente ejecutada muerte de Maude Flanders, acontecida en el episodio "Alone Again, Natura-Diddily" de Los Simpson. Podríamos asegurar que la reacción del espectador ante el hecho fue y seguirá siendo (cortesía de las repeticiones) completamente bicéfala. ¿Reír? ¿Llorar? ¿Llorar riendo? ¿Qué hacer ante la muerte de Maude? Lo cierto es que el contexto colaboró para que su fallecimiento sea entre inesperado y delirante. En el marco de una carrera de autos, y por una torpeza de Homero (¿acaso podía existir otra forma de resolver la situación?), Maude cae de las gradas y muere de manera instantánea. Lo curioso del caso es que es mucho más triste (dentro de la tristeza que se permite una creación como la de Matt Groening) el después de la partida de Maude que la partida en sí misma. Porque el presenciar la infructuosa necesidad de Ned Flanders por rehacer su vida no deja de ser doloroso. Asimismo, el personaje reingresaría a la serie bajo distintas formas, desde una aparición fantasmagórica hasta una presencia obligada en uno de los clásicos episodios de Halloween de la serie.
*3. GEORGE O’MALLEY (Grey’s Anatomy)

No es sencillo mantener el interés por un drama como Grey’s Anatomy. En primer lugar, porque los vaivenes de guión son muchos (y no siempre óptimos) y fluctúan con demasiada rapidez. En segundo lugar, porque es inevitable encariñarse con un personaje, aun sabiendo que es muy probable que ese personaje muera (o deje la serie para no volver). A fin de cuentas, estamos hablando de una creación de Shonda Rhimes, mujer devota por los ribetes telenovelescos. Grey’s Anatomy va camino a su décima temporada y ya quedan pocos personajes con vida. Con George se cometió una suerte de traición al fanático: luego de que sufriera reiteradas humillaciones, de que sus picos dramáticos fueran arbitrarios (mejor no recordar ese inexplicable romance con Izzie) y de que eventualmente se le prometiera un futuro mejor en otro ámbito que él mismo eligió (el ejército), George le salva la vida a una joven y muere atropellado por un colectivo. Sí, su partida en un punto es leal a la esencia del personaje, pero no dejó de ser una de las más agónicas y devastadoras de la creación de Rhimes. Y eso es mucho decir.
*El último adiós a George O’Malley:
*4. BILL McNEAL (NewsRadio)

La muerte de William "Bill" McNeal fue particularmente triste por una razón: se ocasionó por el fallecimiento del actor Phil Hartman. Uno de los comediantes más extraordinarios en salir de la cantera de Saturday Night Live perdió la vida a manos de su esposa Brynn en marzo de 1988 y, como consecuencia, Paul Simms (creador de la sitcom) decidió hacerse eco de la muerte en la serie. Así, el personaje que interpretaba Hartman fallece de manera súbita por un ataque al corazón. El capítulo – que abre la quinta temporada de NewsRadio – genera una tristeza inmensa, incluso para quienes no eran demasiado fanáticos del programa. Posteriormente, el comediante fue reemplazado por Jon Lovitz, pero ya no era lo mismo. Las interacciones entre su Bill y Dave Nelson (un no menos brillante Dave Foley) se habían convertido en el alma de NewsRadio. Como sucedería años después con John Ritter y 8 Simple Rules for Dating My Teenage Daughter, la muerte de Phil Hartman motivó un homenaje con clase y modesto en una serie que, ya sin él, iría a perder su magia.
*Lo mejor de Phil Hartman en
*5. MARISSA COOPER (The O.C.)
Mucho dice el hecho de que cada persona que haya mirado The O.C. haya perdido el interés cuando se produjo lo impensado: la muerte de Marissa Cooper. Con el personaje interpretado por Mischa Barton nos encontramos con un caso similar al de Jen en Dawson’s Creek: siempre fue una joven de vida turbulenta que se ganaba el corazón del espectador cada vez que aparecía (muy a pesar de la actuación de Barton) y cuya amistad con Summer (Rachel Bilson) la volvía aún más querible. Marissa muere en "The Graduates", el último episodio de la tercera temporada de la serie, y como consecuencia de un accidente automovilístico ocasionado por Kevin. Como no podía ser de otra manera, Marissa fallece en brazos de Ryan (Benjamin McKenzie) mientras (¿era necesario?) comienza a sonar una versión de "Hallelujah" que dejaría desconsolado a cualquier mortal. ¿Lo único bueno de la partida del personaje? La aparición de la gran Autumn Reeser en la cuarta y última temporada, en el papel de la titilante Taylor Townsend. Más allá de eso, nada bueno surgió para The O.C. una vez que Marissa se despidió del programa.






