Furor por una ficción sobre la Camorra

ROMA (El País).- En las últimas semanas, el mundo de la Camorra, la feroz mafia napolitana, ha recibido dos grandes golpes a su organización con el arrepentimiento de un capo y la victoria electoral de un luchador antimafia. El tercero parece venir de la pantalla chica: el canal premium Sky ha emitido desde mayo Gomorra-La serie, 12 capítulos inspirados en la novela del periodista Roberto Saviano con una calidad y un ritmo que resisten la comparación con la ya mítica The Wire.

Marco D'Amore, que encarna a Ciro El Inmortal, un asesino despiadado y protagonista de la serie, explica su dilema: "A mi personaje lo odian todos. Me parece que es el mejor premio: no se puede admirar a un personaje así". La clave de Gomorra, además de una trama y una realización que ha mantenido a los abonados pegados al televisor semana tras semana (ya fue vendida en 50 países), está en haber superado un reto muy difícil: lograr que ninguno de los personajes fascinantes del clan mafioso (el patriarca que intenta seguir manejando los hilos del poder desde prisión, la esposa que encarna la fuerza de las mujeres de la mafia, el hijo que se sobrepone a sus propias limitaciones para mantener la cuota heredada de poder y de sangre) se convierta en un modelo fascinante.

Eso mismo explica el autor, Roberto Saviano: "El desafío era contar el mal desde dentro, manteniendo la credibilidad del relato, aligerando la narración pero sin suscitar empatía. No queríamos contar la Camorra al mundo, sino contar el mundo a través de la Camorra. Y nuestro punto de partida era el siguiente: todos los personajes son malos. Porque en ese mundo no hay personajes positivos, ninguno con el que el espectador pueda solidarizarse ni identificar. Ningún bálsamo de consuelo. Ningún respiro de alivio". Y eso es Gomorra. Un viaje sin respiro a través del poder y la crueldad de la mafia napolitana.