La insólita confesión de Vicky Xipolitakis: "Secuestré a dos amigos para pasar la cuarentena"

Fiel a su estilo, Vicky Xipolitakis confesó entre risas haber "secuestrado a dos amigos para pasar la cuarentena". "Estoy pasándola con la chica que me ayuda y con Lucas y Leo, que se vinieron a casa. Leo se fue por trabajo y me quedé con Lucas", contó este viernes con total desparpajo en Hay que ver.

Su vida, claro, gira alrededor de su hijo Salvador Uriel: "Soy mamá desde hace más de un año y la cuarentena no me cambió el ritmo. Soy mamá 25 horas al día, aunque sé que no existe esa hora. Extraño no poder ver a mi familia, pero la prioridad es mi hijo. Acá no entra ni sale nadie porque protejo mucho al bebé. Me traen las cosas hasta la puerta y, pasadas tres horas, las retiro y las lavo una por una. Me levanto con la lavandina y me acuesto con la lavandina. Y solamente le cocino a mi hijo, a mí no".

Vicky contó también que tiene varios pretendientes. "Siempre están los buscas... Hay que ver si encuentran. Me ven inaccesible pero juro que soy re accesible. Me encantaría volver a enamorarme, tengo mucho amor para dar. Me escriben muchos polistas y me sorprende porque no soy del target: las mujeres de polistas son más finas y casi no hablan". Y remarcó que de Javier Naselli, su última pareja, solamente rescata a su hijo: "Soy casi perfecta, a veces me equivoco o las cosas no salen como imaginé. Fue el caso de mi última pareja, que lo único bueno fue el hijo que tenemos, después no pasó nada bueno entre nosotros".

Hace algunas semanas Vicky tuvo un cruce fuerte en redes sociales con Luli Salazar, que se mostró con un barbijo muy caro, de la marca Louis Vuitton. "Ahora tengo paciencia solo para mi hijo y cuando veo cosas fuera de lugar, me sale desahogarme. No tengo nada contra ella. Es más, una vez me aconsejó una pastillita para cólicos. Me pareció frívolo e innecesario que se muestre con ese barbijo, porque sirve cualquiera. Ojo que si pudiera lo tendría, pero me pareció fuera de lugar promocionar eso en un momento tan sensible. Capaz hasta me lo pongo yo, pero me pareció desubicado. O un chiste en un momento que no encaja", señaló.

Xipolitakis también reflexionó acerca de cómo la percibe la gente: "Sé que hice muchas cosas en mi vida porque siempre fui muy aniñada. Soy como una niña sobrepasada de alegría y por eso me trataban de tonta. Fueron etapas en mi vida. Pero sé que a este mundo vine a dar alegría. Yo no tengo maldad".

Para finalizar, dijo que tiene muchas ganas de volver al "Bailando por un sueño". "Quiero hacer algo por mí, porque desde que soy mamá mi prioridad es mi hijo. Sería un desafío bailar y tuve una reunión, pero después pensé en las horas de ensayo, en la producción cada vez que bailás y la verdad es que no tengo tiempo porque crio sola a Salvador".