El distrito de Disney World controlado por DeSantis toma una drástica decisión

En un nuevo capítulo de la batalla que enfrentan Walt Disney World y el gobernador de Florida, Ron DeSantis, el distrito especial que rige Disney y que en febrero tuvo un cambio en la junta a una elegida por el político republicano, anunció su decisión de abolir todos los programas de diversidad, equidad e inclusión.

El martes, a través de un comunicado de prensa, el ahora Distrito de Supervisión de Turismo de Florida Central, antes conocido como Reedy Creek Improvement District, citó una investigación interna de las políticas anteriores, alegando que se implementaron programas de contratación que discriminaron a los estadounidenses por motivo de género y raza, que costaron millones de dólares a los contribuyentes: “Las denominadas iniciativas de diversidad, equidad e inclusión se impulsaron durante el mandato de la junta anterior y eran ilegales y sencillamente antiestadounidenses”, señaló el administrador Glenton Gilzean: “Nuestro distrito ya no participará en ningún intento de dividirnos por razas o de avanzar en la noción de que no hemos sido creados iguales”. Asimismo, puntualizó: “Como exjefe de la Liga Urbana de Florida Central, una organización de derechos civiles, puedo decir definitivamente que nuestra comunidad prospera solo cuando trabajamos juntos a pesar de nuestras diferencias.”

Por lo tanto, la junta actual tomó la decisión de disolver el comité de diversidad del distrito y también cualquier función relacionada con él. Los empleados no podrán usar el tiempo de trabajo para hacer iniciativas de este tipo. Esta modificación solo afecta al gobierno y no a las empresas que están adentro de la jurisdicción, como Disney, destaca CNN.

La medida da eco a la agenda del gobernador, que en diferentes proyectos ha defendido la reducción de este tipo de programas. En esta ocasión se suprimieron las iniciativas de la época en la que el distrito estaba controlado por partidarios de Disney porque, señaló el comunicado, adjudicaban contratos basándose en objetivos de paridad racial o de género.

Entre las políticas respaldadas por DeSantis, quien aspira a ser el candidato republicano en las elecciones de Estados Unidos, se distingue una ley que bloquea a las universidades públicas poder acceder a fondos federales o estatales en programas de diversidad, entre otras.

La nueva junta impone sus lineamientos

En uno de los movimientos más determinantes, el gobernador de Florida firmó en febrero un proyecto de ley que da poder estatal sobre Reedy Creek. La medida la tomó un año después de que el entonces CEO de Disney, Bob Chapek, fijara su postura sobre la ley en Florida sobre los derechos de los padres en la educación, conocida entre los críticos como “No digas gay”, que restringe la enseñanza de orientación sexual y de género en las aulas de educación básica.

La creación del distrito Reedy Creek fue crucial para que Disney construyera su complejo de parques temáticos cerca de Orlando en los 60. De esta manera, la empresa pudo proporcionar servicios de zonificación, protección contra incendios, servicios públicos e infraestructuras en su extensa propiedad. La jurisdicción la controlaron partidarios de Disney por décadas, antes de que los designados por DeSantis tomaran el mando a principios de este año, rememoró la agencia AP.

Actualmente, la batalla continúa. Disney demandó a la junta y a DeSantis ante un tribunal federal, al defender que el estado tomó represalias contra una compañía que ejercía sus derechos. En respuesta, la junta también demandó a Disney, pero ante un tribunal estatal, un juez de Florida rechazó recientemente el pedido de la compañía para desestimar el caso.

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