
Acción por partida doble
Misión Imposible 2 reúne la pasión de Tom Cruise por el género y el talento del director John Woo
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Centrar todo en la chica. Ella es el motor de la historia." Ese fue el pedido de John Woo a los guionistas. El director encontró fría y desapasionada a la primera Misión: Imposible , bajo la realización de Brian De Palma, por lo que decidió meter manos a la obra y dejar su sello, su toque estilístico, una cuidada puesta en escena coreografiada por un experto del cine de acción. "La cámara lenta, el tipo que dispara con dos armas, las palomas... me gustan las imágenes, la fantasía, el lenguaje figurado", puso en sobreaviso Woo. (Ver recuadro.) Así, Tom Cruise y Woo crearon una de las duplas más explosivas del cine, en una película a pura adrenalina donde el no me lo creo no tiene lugar.
Es sabido que cuando Cruise quiere algo, lo consigue. Tom quería para el comienzo de la película (puntualmente en la escena de los títulos) escalar una montaña, sin doble, ni soga de seguridad. John Woo y los ejecutivos temían por él y por la continuidad del proyecto, ya que no parecía una locura pensar que a la estrella (en su doble rol de héroe y productor) le ocurriera algún accidente. A pesar de las dudas le dieron el OK y Cruise se la bancó solito. Incluso le gustó tanto que hasta se animó a quedar colgado de un helicóptero a seis metros de altura.
"Desde el vamos, Tom quería hacer algo que fuese un verdadero desafío -comentó Woo-. Cuando lo conocí me dijo cuánto le agradaba Bruce Lee, y en ese momento pensé que eso era magnífico. Aquella devoción me inspiró para concebir extraordinarios momentos de acción para él."
Cuando en 1996 se estrenó en los Estados Unidos la primera Misión Imposible , las críticas mostraron una mezcla de desdén e indiferencia. Pero eso no desalentó al público: el film batio récords e hizo posible que Cruise se alzara con 70 millones de dólares, sumando el salario como actor y las ganancias logradas como productor del film dirigido por De Palma (ver recuadro).
A pesar de la excelente respuesta en las taquillas, Cruise intentó superarse. Por eso eligió a Woo, un maestro del cine de acción, y se puso en campaña para que el guión, esta vez sí, se entendiera (muchos alertaron que la historia anterior era indescifrable). Con la única condición de que una historia de amor debía estar en el núcleo del argumento -allí es que entra en acción Thandie Newton-, Woo le dio el sí definitivo al relato que terminó de moldear Robert Towne (el único acreditado), sobre un guión del que participaron los mejores especialistas del momento: Wesley Strick, William Goldman y Michael Tolkin, entre otros. Según Woo, Towne fue el encargado de dotar al personaje de Cruise de sustancia dramática y que Misión Imposible 2 aspirara al rango de película de espías, romántica y de corte clásico.
En esta última parte es donde entra en juego Alfred Hitchcock. Para conseguir el clasicismo necesario, Towne se inspiró en uno de los films de suspenso más románticos de todos los tiempos, Tuyo es mi corazón ( Notorius, 1946), además de permitirse alguna que otra referencia a Intriga internacional ( North by Northwest, 1959) y Vértigo (1958). A este cuidadísimo cóctel hay que agregarle el modelo Bond, James Bond, en el perfil del espía que bordea la parodia. Con estos ingredientes, la acción de Woo no da respiro y sumerge al espectador en una fuerza kinética de la que es imposible escapar. Esa es la misión.
Un verdadero tanque
Cuando Misión Imposible 2 llegó a los cines argentinos, el 15 de junio, marcó un record a nivel nacional: se convirtió en el film más visto en la última década para un fin de semana de estreno. Llevó a 322.581 espectadores, el equivalente a 1.840.756 pesos, en los primeros cinco días, en 65 salas. Esto quiere decir que en el arranque local superó nada menos que a Titanic. La película de James Cameron congregó en su primer fin de semana (febrero de 1998) a 313.064, aunque, vale aclarlo, con varias pasadas menos debido a su extensa duración.
Lo que pasó en nuestros cines es un fiel reflejo de lo que ocurrió en los Estados Unidos. En sus primeros cinco días tuvo una recaudación extraordinaria de 80 millones de dólares, lo que le dio la tranquilidad a Cruise y a sus socio que desembolsaron nada menos que 125 millones de dólares para llevar adelante el proyecto.
Las claves de Woo
En 1986 John Woo se consagró como el máximo exponente del violento cine de acción de Hong Kong con Amenaza final ( A Better Tomorrow ) de la que hizo su secuela. Con El kille r (1989), Bullet in the Head (1990) y Hardboiled (1992) se consolidaría definitavemente como el maestro del género.
En el 92 pasó a la historia como el primer director oriental en ser contratado para filmar en Hollywood. Allí hizo Operación cacería (1993), Código: flecha rota (1996), Contracara (1997) y la mencionada Misión Imposible 2 .
"No me preocupa repetirme. Simplemente filmo lo que me gusta", asegura. a continuación, las pistas de un auténtico film woodiano.
Cámara lenta. Cruise se anima a jugar con ella en una gran escena. Es el primer enfrentamiento con el malo de la película (Dougray Scott). Tras una explosión y en cámara muy pero muy lenta y con pirueta incluida en el aire logra escapar.
Palomas. En esta ocasión, Woo mete la cámara lenta y las palomas en la misma escena. Una escena llena de sorpresas. Las palomas son testigos de una pelea al mejor estilo Matrix. Una explosión, una puerta que se abre y una paloma blanca que le marca el camino a Tommy, el nuevo héroe de acción.
Cara a cara. Clásico de clásico. El héroe y el villano se ven las caras en una especie de duelo. También reaparece otro tema de Woo, explorado al máximo en Contracara: las dos caras de la misma moneda, el juego de las falsas identificacionesy la confusión: el villano se disfraza del héroe y el héroe del villano. "¡Lo más difícil de hacerme pasa por vos fue aprender esa sonrisa idiota que hacés cada cinco minutos!", le dice el malo a Hunt, en una frase de antología.
Dos pistolas. Como buenos pistoleros, esos que tanto le gustan a Woo, Tom se luce con las dos pistolas, como si estuviera en el lejano oeste.
La persecución. Una escena clave e impactante en todas sus películas. Aquí consigue la mejor persecución en moto de toda la historia. Imágenes al ras del suelo y piruetas increíbles para ver una y otra vez.






