Cómo vivir la final en "modo zen"
El relato de un gol sin gritar, con voz calma y pausada. El rápido consuelo del comentarista y el relator para los hinchas del equipo que sufre el gol en contra. Música calma y relajante en lugar del sonido ambiente ensordecedor de las tribunas; un médico que durante la transmisión invita a respirar profundamente y recomienda salir a caminar en el entretiempo para bajar la ansiedad. Parece un cuento de El Negro Fontanarrosa, pero ocurrió en verdad durante la primera final de la Copa Libertadores entre Boca y River, que hoy finalmente se definirá a favor de uno u otro bando.
Lejos del dramatismo con que los hinchas de los dos equipos más grandes de la Argentina viven la gran final, existen iniciativas que invitan a vivirla "en modo zen". Que buscan hacerlas aptas para cardíacos, con el foco puesto en la salud más allá de cualquier resultado.
La idea, que surgió de la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC) y una reconocida marca de agua mineral baja en sodio, se replicará esta tarde desde el Monumental con los mismos protagonistas y por el mismo dial: Eduardo "Polaco" Caimi en los relatos, Leonardo Uranga en los comentarios y el cardiólogo Gonzalo Díaz Babio a cargo de velar por la salud de los oyentes de la mítica Radio Colonia (AM 550).
"La idea es seguir la misma tónica que la primera final. Es decir, proteger, abrazar, y amparar a los enfermos cardíacos y a aquellos que están por colapsar –explica Caimi, que reconoce que fue un verdadero desafío relatar en modo zen–. En este segundo partido intentaremos estar mucho más atentos porque va a haber una definición. Vamos a hacer mucho hincapié en el tema del consuelo, porque hoy sí o sí uno de los dos va a ganar y el otro va a perder. Lo más importante será cobijar al que perdió, ayudarlo a que sobrelleve ese primer impacto, porque va a ser un momento duro", vaticina el relator.
De todas maneras, y casi anticipando cuáles serán esas palabras de aliento, Caimi afirma que más allá del carácter de histórica de esta final, "ni Boca ni River van a perder un gramo de grandeza por cómo salga hoy". "Si los dos son tan grandes es por el otro: se retroalimentan, se necesitan. Hoy hay mucho miedo a perder porque el que pierde es el humillado –plantea–. Lamentablemente, estamos contaminados como sociedad: acá se disfruta más la derrota del otro que la victoria propia. Pero el resultado no va a cambiarnos la vida. Hay que hacer hincapié en eso".
Atento a cada palabra que dice para tratar de bajar un mensaje de tranquilidad, el doctor Díaz Babio, miembro de la SAC e hincha de Boca, aunque no fanático, cuenta que para la final de hoy va a insistir en que la vida es más importante que un partido de fútbol, por más que sea la final más especial de todas. "Está comprobado que este tipo de partidos elevan el riesgo caridiovascular. Desde Francia 98 se empezó a observar que después de partidos como el de Inglaterra vs. Argentina (donde el seleccionado británico fue eliminado por el argentino) al otro día se disparaban eventos cardiovasculares entre los hinchas que quedaban afuera –cuenta el especialista–. La evidencia científica indica que antes, durante y después de eventos deportivos de gran magnitud hay un aumento de episodios cardiovasculares", afirma Babio.,
Por caso, en la cancha de Boca debieron ser atendidas a más de 100 personas por cuestiones relacionadas con el corazón. Un número muy superior a cualquier otro partido disputado en ese estadio.
"La idea de la transmisión es bajar el estado de excitación. Caimi y Uranga, con el relato y los comentarios en tono pausado, hicieron un gran trabajo. Yo me meto cuando me preguntan qué hacer, cómo calmar el corazón del que sufre el gol en contra, por ejemplo –cuenta Babio–. ¿Si es una buena idea recomendarle a un paciente cardíaco no ver el partido? Yo creo que no, porque eso lo va a angustiar más. Lo que sí le recomendamos es tomar la medicación habitual, evitar los excesos en comida y bebida y ver el partido en el ámbito más amigable posible, menos hostil, con gente que además pueda contenerlo".
Sin duda, otro ingrediente que ayuda a calmar los nervios y bajar la ansiedad es la música. Atentos a la gran final, desde Spotify, la aplicación creada para reproducir música vía streaming, crearon la playlist "Calma. Es fútbol", para escuchar antes, durante (digamos en el entretiempo) y después de la gran final (sobre todo si el resultado no es bueno).
"Sabemos que además de la pasión y la alegría que sentís por tu equipo, estás que te comés las uñas de los nervios por los partidos que se acercan. Escuchá Calma Es Fútbol, la playlist que reúne las canciones ideales para que puedas manejar los nervios de los partidos definitorios", invitan desde la plataforma.
La playlist, armada especialmente para la ocasión, combina temas musicales de relajación, meditación y yoga. No hay ningún hitazo ni nada que pueda alterar el pulso o invite a mover el cuerpo. Solo música instrumental que invita a cerrar los ojos, llevar el aire a la panza y largarlo de forma lenta, pausada, mientras intentamos poner la mente en blanco y repetimos hasta el infinito el mantra "Calma. Es fútbol. Calma. Es fútbol. Calma. Es fútbol".