Coronavirus: "El viajero del tiempo", el cortometraje de un argentino que muestra la cuarentena en Venecia

En las horas previas al cierre total de Venecia por la pandemia de coronavirus, el realizador audiovisual Joaquín Gómez decidió retratar la ciudad vacía. "Il viaggiatore del tempo" (El viajero del tiempo), es un cortometraje de dos minutos y medio que muestra cómo se transforman los rincones más bellos de la ciudad italiana cuando late a su propio ritmo. "Venecia volvió a ser una obra de arte", le dijo Gómez a LA NACION.

Gómez llegó a Venecia para trabajar como técnico audiovisual de la Bienal de Arquitectura, que iba a inaugurarse en mayo. Apenas llegó, el clima era normal: se conocían noticias de la propagación de la covid-19 y su impacto en China, pero todavía había cierto escepticismo de su gravedad.

"Se decía que era una exageración de los medios, hasta que empezamos a ver que todo cerraba más temprano. En los días que siguieron se empezaron a registrar muchísimos casos y se terminó de cerrar toda la ciudad", relató Gómez a este medio.

"Un día salí a la calle y sentí que era como una película", describió el argentino sobre los primeros días de la cuarentena en Venecia. "Empecé a filmar distintos lugares de la ciudad con mi teléfono y mi hermano, Tomás Gómez, que es editor audiovisual empezó a trabajar con ese material".

Además de las espectaculares imágenes de la ciudad, el corto incluye un texto escrito por el realizador que está leído por distintas personas en más de 12 idiomas.

"Creo que esta situación dejó ver cierta fraternidad y ayuda entre culturas, porque todos estamos sufriendo lo mismo y el mundo pedía a gritos que nos uniéramos", apuntó el realizador del cortometraje.

La música que hila el relato de "Il viaggiatore del tempo", también fue compuesta por Gómez. "Quise representar los sonidos de la Venecia actual, en la que solo se escuchan las palomas, el viento y las campanas, que nunca dejaron de sonar".

Sobre el clima que se vive por estos días, el realizador quedó sorprendido con el cambio de ánimo de los residentes de Venecia. "Si bien al principio todo era paranoia e histeria, muy rápido se empezó a ver cierto optimismo, vecinos que se ayudan entre sí, y se ven banderas con frases que dicen 'Todo estará bien'", comentó el argentino.

"Esa forma de vivir en los últimos días, esa fraternidad y esas ganas de disfrutar de las pequeñas cosas, me mantuvieron muy tranquilo durante toda la cuarentena", manifestó.