Depresión en la vejez: las personas mayores que toman alcohol en exceso tienen más síntomas depresivos
Un nuevo estudio vinculó la jubilación, el consumo de alcohol y la depresión; los resultados indican una diferencia entre aquellos que beben con moderación y en exceso
3 minutos de lectura'
Expertos de la Universidad Mayor, en Santiago de Chile, y de la Universidad Simmons, en Boston (EE.UU.), examinaron la relación entre la jubilación, la depresión y el consumo de alcohol y concluyeron que las personas jubiladas presentan más síntomas depresivos que las que continúan trabajando, y que esta situación empeora si consumen alcohol en exceso.
El estudio, publicado en “Aging and Mental Health”, se encargó de monitorear durante 14 años a más de 27.500 hombres y mujeres de más de 50 años residentes en Estados Unidos, entre los que había participantes jubilados y otros con una jubilación parcial, y a los que se sometió cada dos años a un cuestionario sobre sus vidas.
Para medir la depresión se incluyeron preguntas como si se habían sentido tristes durante la última semana o si todo había supuesto un esfuerzo. A su vez, para determinar la influencia del alcohol, se les preguntó si lo consumían, y en caso afirmativo, cuántas bebidas solían tomar cuando lo hacían.
A partir de esto, se determinó que los participantes tenían 1,4 de ocho síntomas posibles de depresión, y los jubilados mostraban de media 0,04 síntomas más que aquellos que todavía estaban trabajando.
Respecto al impacto del alcohol en la depresión, se observó que los jubilados que decían beber en exceso, lo que implicaba cuatro o más bebidas diarias entre las mujeres y cinco o más entre los hombres, tenían de media 0,07 síntomas de depresión más que los no bebedores. Sin embargo, destaca que aquellos que bebían con moderación, es decir, de una a tres bebidas al día para las mujeres y de una a cuatro para los hombres, tenían 0,09 menos síntomas que los abstemios. Los investigadores han relacionado este resultado con la capacidad del alcohol para mejorar el estado de ánimo a través de la socialización.
En este punto, los autores del estudio aseguraron que no defienden el consumo de una copa o dos con regularidad para adaptarse a la jubilación. “Beber alcohol aumenta el riesgo de caídas y otras lesiones y puede provocar dependencia, y la mala salud que suele acompañarla”, aseveró Antonia Díaz-Valdés, de la Universidad Mayor de Santiago de Chile.
Así, los expertos recomendaron a las autoridades políticas que ofrezcan mecanismos de apoyo a las personas durante su transición a la jubilación para evitar que recurran al consumo excesivo de alcohol y ayudarles a adaptarse al cambio. “No hay duda de que adaptarse a la jubilación puede ser difícil para algunas personas, pero recurrir al alcohol no es la respuesta. Debemos encontrar y ofrecer alternativas más saludables”, ha subrayado Díaz-Valdés.
Otras noticias de Salud mental
S.O.S Fin de año. Daniel López Rosetti, médico clínico y cardiólogo: “Trabajamos mucho más y peor”
"Conducta errante y peligrosa". Nick, el hijo de Rob Reiner, había sido diagnosticado con esquizofrenia
El café, afuera. Conrado Estol desestimó el uso de medicamentos como la única solución para dormir bien: “Es algo crítico”
1Fue la primera y única vez que se besaron. Kristin Cabot, la protagonista de la “kisscam” en el recital de Coldplay, rompe el silencio
2Fue vendedor ambulante, jugó al fútbol en Europa y fundó un club para sacar de la calle a cientos de chicos: “Irme de mi casa me salvó la vida”
3Campari Orange: el clásico inconfundible que se adapta a cualquier momento del día
4La historia real detrás de uno de los grandes éxitos de Disney de los 90, inspirado en el asesinato de toda una familia










