Una oficina con una sola ventana, tabiques de yeso, cielos rasos suspendidos y sin cocina se transformó en un maravilloso loft con dos cuartos y terraza integrada.
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Cuando Hugo y Salomé llegaron a Buenos Aires desde Francia hace cinco años, buscaron “un departamento distinto” (preferentemente en malas condiciones, para reformarlo a su manera). Así encontraron un local comercial que funcionaba como oficina de grandes dimensiones, techos altos y terraza, todo en el mismo nivel. Entre sus desafíos estuvieron el de generar dos dormitorios en una propiedad con una sola ventana, así como hacer una cocina de la nada, con la cantidad de dificultades técnicas que eso implica. Lograron lo que querían con mucha imaginación y el aporte del arquitecto Fernando Valeriani, de Estudio 866.

Una cocina hecha de cero

Varillas de hierro que cuelgan de la losa sostienen la tubería del extractor que atraviesa el ambiente y le transmite su poderoso estilo industrial.

Papel principal

"Buscábamos un departamento distinto, con ambientes atípicos y en mal estado para convertirlo en algo que nos representara."
Hugo y Salomé, dueños de casa

El mural traído desde Francia resultó ideal para vestir la amplia pared del living. Eligieron el motivo porque remite a vacaciones.

De gusto moderno y minimalista, los dueños definieron rápido la paleta: una caja blanca con mucha madera para compensar la frialdad del piso y elegantes toques de negro.

Arriba, piezas de bijouterie para grabar de SB Collection, una marca creada por Salomé, la dueña de casa, junto con una socia argentina.
Cuarto de huéspedes

Un cerramiento de vidrio repartido resguarda el cuarto de huéspedes, que se ubicó en el espacio central a modo de “vidriera”.
Pulmón urbano

El ventanal que da a la terraza está protegido del sol por la galería: eso permitió prescindir de cortinas y dejar la vista al exterior libre.

El arquitecto Fernando Valeriani, responsable de toda la reforma, transformó la vieja terraza en un oasis verde: “Quería que al entrar te sintieras atraído por esa jungla que se ve al final de la perspectiva”.

Aire y descanso
El cuarto principal –ubicado donde estaba la recepción de la oficina– se cerró con tabiquería de construcción en seco con aislación acústica. Está ubicado junto a un patio interno que, además de dar ventilación y luz natural, tiene un placard/baulera que esconde la caldera y los equipos de aire. Un mueble de punta a punta es respaldo de cama, mesita de luz, lugar de guardado y estante para deco.

“Cuando lo visitamos, esto ni se asomaba a un lugar apto para vivir, pero fue eso, justamente, lo que nos permitió imaginar muchas opciones para cada cosa”

En el baño principal, ladrillos de vidrio que van bien con el look industrial y traen algo de luz natural de la cocina lindante. El toilette (abajo, derecha) se remodeló completo con revestimiento y mesadas en micro alisado gris plomo.
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