La ‘pregunta de oro’ que ayudó a Jeff Bezos a dejar su trabajo y crear Amazon

El fundador de Amazon, Jeff Bezos, es una de las personas más ricas en todo el mundo y su vida la dedicó, plena e íntegramente, a los negocios. Conocedor del mundo de las finanzas y de emprendimientos, el magnate estadounidense adquirió, con la creación de la empresa de comercio electrónico, una fortuna que asciende a la exorbitante cifra de 171 millones de dólares que lo ubica en el segundo puesto de multimillonarios, según la revista especializada en negocios Forbes.

A pesar del reconocido éxito que ostenta, Bezos atravesó un proceso del cual poco se conoce y que, mediante algunos cuestionamientos, lo llevó a ser uno de los hombres con más poder económico. En sus comienzos, el empresario empezó a escalar peldaños en un fondo de cobertura incipiente, que en su definición significa una sociedad privada de inversión que maneja títulos de terceros, hasta llegar a la posición jerárquica de vicepresidente de la compañía.

En el año 1994 -cuando se creó Amazon-, Bezos comenzó a elucubrar sobre la posibilidad de abandonar su puesto de trabajo, en busca de nuevos horizontes para perfeccionar su camino. Al tomar la drástica decisión, decidió comunicársela a su superior y este, en consecuencia, decidió que lo mediten juntos en una extensa charla que se dio por la zona del Central Park.

Después de varias horas de explicar y argumentar su deseo, el director le pidió que medite y tenga en cuenta sus consejos para volver a reunirse dentro de dos días. “Sería una mejor idea para alguien que aún no tiene un buen trabajo”, le deslizó, quien era, por entonces, su jefe.

Las 48 horas restantes le sirvieron a Bezos para poner la mente en frío y analizar todas las variables posibles para soltar un empleo que le enriquecía su currículum, pero en el fondo sentía que podría esperarle algo mejor. Según detalló el sitio Inc, el empresario encaró una teoría llamada “marco de minimización del arrepentimiento”, que también podría enmarcarse en la frase “la pregunta de oro”.

¿En qué consiste la pregunta de oro? El trabajo se basó en una concepción meramente mental, donde el cerebro predomina como un todo y se equilibran las emociones. Como si fuera un viaje en el tiempo, se imaginó a sus 80 años de edad y en ese preciso instante, en retrospectiva, ver el recorrido de su vida con el objetivo de identificar y minimizar sus arrepentimientos. “Sabía que cuando tuviera 80 años no me arrepentiría de haber probado esto”, especificó Bezos, en una antigua entrevista que concedió sobre las decisiones trascendentales que tomó en su vida.

Después de renunciar a su trabajo y adentrarse de lleno en Amazon, Bezos empezó a entender la lógica del internet, que hoy en día es una de las herramientas fundamentales que tienen las personas a su alcance. “Sabía que lo único de lo que podría arrepentirme es de no haberlo intentado nunca y sabía que eso me perseguiría todos los días. Entonces, cuando lo pensé de esa manera, fue una decisión increíblemente fácil”, confesó.

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