Restaurante/ Vasco Fermín

Luego de muchos años al frente del restaurante del Centro Vasco Francés, los Uriona han ganado una clientela que los sigue fielmente y que llenó desde el vamos el nuevo local que han instalado a pocos metros de su anterior destino.

Pocas cosas han cambiando con la mudanza. El mismo tipo de cocina, no sólo vasca sino española, tradicionales en sus preparaciones más populares entre nosotros, los insumos de primera calidad más algunos importados de gran precio, con notable abundancia de pescados y mariscos. La misma atención que conoce y distingue a los clientes, muchos de ellos notables. Los mozos en total sintonía. Los Uriona, Susana y Fermín, siempre al frente, secundados por sus hijos en un local amplio y cuadrangular con buenas vidrieras, que fue gimnasio hasta hace poco. La única peculiaridad son dos hileras de columnas, que determinan una nave central, y dos laterales, mucho más angostas, donde reina el blanco en las paredes, piso y mantelería. Una doble puerta acabaría con incómodas corrientes de aire en los días más rigurosos y bajar un poco la iluminación agregaría intimidad al salón.

Pero al Vasco Fermín se va a comer y eso lo tienen bien en claro tanto patrones como parroquianos. La clientela paga alegremente y sin chistar jamón y lomo de Jabugo, carabineros, cigalas, angulas, sardinas portuguesas, pulpo español y bacalao noruego. Con precios más moderados, tortilla española ($ 7), mejillones provenzal ($ 8) o sopa de pescado ($ 3).

Sabido es que la cocción a la plancha es saludable y asegura el buen sabor. Es ideal para los chipirones, el pez espada y el abadejo, si bien se los puede pedir también a la santurzana o en salsa verde. Hay platos clásicos siempre en la lista, como cocoxas en salsa verde, pimientos del piquillo rellenos, bacalao al pil pil ($ 18), croquetas de pescado ($ 7). La comparación con los precios del año anterior muestran bajas, algunas importantes, en varias preparaciones, con idéntica calidad y abundancia en las porciones. Sólo es de lamentar que en la carta subsista la oferta de pescados al roquefort, que sepulta el sabor de los mismos. Arroces y paellas son otras opciones, mientras que los postres (alrededor de $ 4), tientan con buenas natillas y el entrañable arroz con leche.

Conviene reservar, se llena y la espera, un fin de semana, puede ser larga.

Moreno 1356; 4384-5497/ 4383-5021. Abre mediodía y noche, de lunes a sábados. Tarjetas. Estacionamiento enfrente.

Por María Esther Pérez

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