“Plandemia” y la viralidad en un mundo que duda
Aún hay incertezas y divergencias en la comunidad científica médica sobre el SARS CoV-2; y también, en disciplinas sociales y económicas, sobre sus efectos y la aceleración (actividades no presenciales) o el freno (¿caerá Airbnb?) de muchos hábitos. No hay antecedentes de un asunto de tal impacto en los comportamientos globales. Ni en el volumen de información. Un "hecho social total", concepto acuñado cien años atrás (1923) por Marcel Mauss.
Mientras asistimos al descongelamiento progresivo de las medidas que confinaron a un tercio de la población en sus casas, la semana pasada –lunes–, un video repleto de desinformación y teorías conspirativas titulado "Plandemia" fue publicado en redes sociales y retirado tres días después por infringir autorregulaciones sobre veracidad: con estética y narración de calidad documental, participación de celebridades y científicos desacreditados como la Dra. Judy Mikovitz, desafía las recomendaciones sanitarias. Redes como YouTube, Twitter y Facebook fueron puestas a prueba: debían lograr que no se multiplicara de manera, literalmente, viral.