Aborto legal: expectante y confiado, Alberto Fernández sigue el debate a distancia
Una tensión controlada, así vive por estas horas el gobierno nacional el debate por la legalización del aborto en la Cámara de Diputados. Con una agenda cargada y centrada en el primer año de gestión, el presidente Alberto Fernández monitorea de forma permanente lo que ocurre en el recinto con el presidente de la Cámara baja, Sergio Massa, y la secretaria de Legal y Técnica, Vilma Ibarra, entre otros.
Si bien nadie se anima a cantar victoria de forma anticipada, en la Casa Rosada descuentan que la iniciativa obtendrá la media sanción en las primeras horas de mañana. Así, expectante y confiado, el jefe del Estado sigue el debate a distancia. Aunque se deslizó que podría estar presente al momento de la votación, esa opción, por el momento, está descartada.
Según las cuentas que manejaban en Balcarce 50, serían 130 votos positivos lo que obtendría el proyecto que legaliza el aborto, que llegó al recinto con dos modificaciones –la objeción de conciencia institucional y la asistencia de al menos uno de sus progenitores o del representante legal para las menores de 16 años– que se introdujeron durante el debate de las comisiones de Legislación General, Legislación Penal, Mujeres y Diversidades, y Acción Social y Salud Pública, que ayer aprobaron el dictamen. Estos cambios fueron claves para alcanzar los votos necesarios.
Desde temprano, representantes del Poder Ejecutivo estuvieron presentes en el recinto. Ibarra, una de las principales impulsoras del proyecto, armó su búnker en el despacho de Massa. También estuvo desde primera hora la ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta. Después se sumaron la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, y la asesora presidencial Cecilia Nicolini.
Por la tarde, en las oficinas del presidente de la Cámara baja hubo una reunión de la que participaron Ibarra, Alcorta, la ministra de Seguridad, Sabina Frederic; la titular de la Anses, Fernanda Raverta; el ministro de Salud, Ginés González García, y el diputado Pablo Yedlin, entre otros, donde se habló de la necesidad de "darle volumen y seriedad al debate", pero fundamentalmente dejar en claro a la tropa del Frente de Todos que vota en contra del proyecto que la iniciativa la envió el Presidente. Con esto, buscan serenar las críticas.
Además, la fotografía de Massa con los funcionarios fue otro de los mensajes que buscaron instalar desde temprano.
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