Amenazan al líder de la Bancaria
No bien Sergio Palazzo aterrizó en Tucumán, le hicieron sentir el rigor de que no sería bien recibido. En la casilla de su teléfono celular ya se amontonaban mensajes amenazantes, algunos con referencias a su esposa e hijos.
De visita a la provincia con motivo del "mes del bancario", el jefe del sindicato fue blanco de una serie de intimidaciones que lo obligaron a recurrir a la policía y a hacer la denuncia en la fiscalía de turno. Palazzo no dudó en vincular el episodio con la disputa que mantiene con el gobernador José Alperovich por los 36 despidos en la Caja Popular de Ahorros, un organismo público que depende del gobierno provincial.
Desde su llegada, Palazzo recibió mensajes que indicaban que estaba siendo seguido. Una de las amenazas llegó cuando su teléfono celular estaba en manos de un policía que tomaba nota de la leyenda de las intimidaciones. "Acá no se jode" y "tus hijos pagarán una por una", fueron algunas de las advertencias, según contó el gremialista a LA NACION.
Palazzo hizo la denuncia en la Comisaría 1a de San Miguel de Tucumán y activó una causa en la fiscalía de turno, a cargo de Diego López Ávila. Una ironía del destino: López Ávila tiene en sus manos la investigación del asesinato de Paulina Lebbos, un caso que incomoda a Alperovich porque el padre de la víctima involucró a uno de los hijos del gobernador.
"Lo curioso fue que después de hacer la denuncia, ni la policía ni el fiscal decidieron ponerme una custodia", señaló Palazzo.
Los gremialistas tucumanos de la Bancaria tienen una causa abierta en la provincia por denunciar espionaje por parte del gobierno local. Le apuntaron al "D-2", la Dirección de Inteligencia Criminal de la Policía, que responde a Alperovich. En su momento, Palazzo le notificó el tema al ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo.
La cúpula nacional de la Bancaria se reunirá hoy y decidirá que sus dirigentes no asistirán a ninguna convocatoria del Gobierno nacional hasta que el ministro Randazzo no responda sus inquietudes "ante los aprietes en Tucumán". Pese a no integrar la CGT oficialista, Palazzo asistió el viernes pasado a la Casa Rosada al encuentro con el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich.