Boleta única: una mayor legitimidad para los votantes y un desafío para su implementación
Todo cambio de sistema electoral implica un cambio en los resultados; aunque mínimos o grandes, una elección con BUP no va a tener el mismo resultado que una con papeleta partidaria; minimizar los errores es fundamental
- 3 minutos de lectura'
El próximo año, el día de la elección, el presidente de mesa nos entregará una boleta al ingresar al cuarto oscuro. Esto, que es costumbre en la mayoría de los países, se aplicará a nivel nacional por primera vez en nuestro país.
No corre más el sistema que conocíamos, que consistía en elegir una boleta partidaria ubicada en mesas dentro del cuarto oscuro, entre muchas otras, con la posibilidad de hacer un collage con una tijera.
El sistema que dejamos atrás nos ayudó a elegir durante 40 años presidentes, senadores y diputados. No es poco. Es de esperar que el nuevo método despeje dudas y tenga mayor legitimidad entre los votantes.
Todos los sistemas de votación tienen cosas buenas y cosas criticables, y lo que se necesita es tener el mejor sistema de votación para los efectos que se quieren generar, conociendo sus virtudes y sus defectos.
Este sistema de “papeleta” estaba en manos de los partidos políticos, financiera y físicamente. Ellos eran los encargados de la impresión, distribución y control de la presencia de las boletas en el cuarto oscuro. Esto no es ni bueno ni malo, siempre y cuando el elector se encuentre con la boleta en condiciones en el cuarto oscuro y se imprima la cantidad que se dice imprimir. En algunas elecciones hubo problemas con la presencia de boletas, y en muchas, los fondos para impresión de boletas se utilizaron para financiar campañas políticas. En 2011 abundaron denuncias de robos y roturas de boletas que, dados los resultados de las elecciones, afectaron el resultado final.
En las elecciones legislativas de 2025, el votante recibirá una sola boleta de manos del presidente de mesa. Con todas las opciones electorales para que con una lapicera haga su elección. La boleta tendrá en columnas los nombres de los partidos políticos y en filas las categorías a elegir.
Para evitar confusiones, este sistema no termina con las listas cerradas y bloqueadas. Para una misma categoría (diputados) no se va a poder armar un collage de candidatos. Seguiremos eligiendo por partido o alianza en cada categoría. Así, el votante marcará con una cruz el partido de su preferencia.
Lo que el Congreso decidió no poner en la boleta es un casillero de “votar lista completa”, razón por la que cada uno de nosotros tendrá que poner una marca para cada categoría. Olvidarnos de una o hacerlo a conciencia significará un voto en blanco para esa opción. Esta fue una de las últimas decisiones para destrabar la votación. A mi entender, una mala opción.
La ausencia de un casillero de “votar lista completa” traerá consecuencias. Esperemos que sean las que los legisladores buscaban. Todo cambio de sistema electoral implica un cambio en los resultados. Aunque mínimos o grandes, una elección con boleta única no va a tener el mismo resultado que una con papeleta partidaria. Minimizar los errores es fundamental.
El sistema sigue necesitando la misma presencia de fiscales que con cualquier otro sistema. Es la base del cuidado del voto y garantía de seguridad para los partidos políticos.
Nos encontramos entonces en la primera fase de esta reforma; ahora viene el desafío de poner el sistema en práctica, donde diversos organismos, como la Justicia Electoral y la Dirección Electoral, tendrán un trabajo enorme para organizar las elecciones con un nuevo sistema, largas conversaciones con los partidos políticos para definir ciertos temas, y muy especialmente un trabajo de capacitación a la ciudadanía para que las virtudes del sistema se vean impulsadas y las debilidades, minimizadas.
El autor es director ejecutivo de Poder Ciudadano
Temas
Otras noticias de Boleta única
Más leídas de Política
"Colón, un símbolo". El Gobierno publicó un video y volvió a utilizar “Día de la Raza” pese a un decreto de Cristina que le cambió el nombre
Fue velado en el Congreso. Murió el diputado nacional de Pro “Tito” Stefani
Diez meses antes. Grabois anunció que será candidato a diputado nacional en la provincia de Buenos Aires
Razones operativas. La extraña demora de la Casación para fallar sobre Cristina Kirchner y la vinculación con la llegada de Lijo a la Corte