Con choques y debates cerró la campaña en Mendoza

MENDOZA.- Con actos de peso, polémicas, chicanas y fuertes cruces en los debates finales, la campaña electoral por la gobernación en Mendoza cerró ayer, rumbo a los comicios decisivos de este domingo. A diferencia de elecciones anteriores, será una dura pelea en las urnas, ya que se trató de un proceso hiperpolarizado, como ocurre a nivel nacional.

Aquí, el radicalismo y el justicialismo se juegan a todo o nada, sobre todo para llevarse el apoyo de aquellos ciudadanos que aún no tienen decidida su voluntad, que rondarían casi 15% del electorado, según los encuestadores.

De todas maneras, hay un escenario previo que ya consagró a un ganador: el elegido por el gobernador Alfredo Cornejo para sucederlo, el intendente de capital, Rodolfo Suárez, quien obtuvo, como frente Cambia Mendoza, más de 8 puntos de diferencia en las PASO de junio sobre la vencedora de la interna del PJ, la senadora kirchnerista Anabel Fernández Sagasti, la joven "mimada" de la fórmula Alberto Fernández y Cristina Kirchner. En cuanto a los últimos sondeos, los resultados son dispares: mientras el oficialismo local asegura que sacará más de 13 puntos de diferencia, el peronismo dice estar a menos de 4 puntos del hombre de Cornejo.

Así las cosas, desde el mensaje de Suárez sobre la "importancia de la continuidad" de la gestión Cornejo hasta "la necesidad de encender la economía" proclamada por Sagasti, los cierres de campaña tuvieron condimentos especiales, con posiciones y apoyos bien marcados que terminaron en controversia. En el medio, hubo chicanas entre ambas fuerzas por la situación económica, los anuncios rimbombantes y el manejo de los recursos, pero también por las condiciones en las que dejaron la provincia las gestiones peronistas previas.

Uno de los actos que más movilizaron e inquietaron en los últimos días a la política local fue la visita de Alberto Fernández con una docena de gobernadores y candidatos, que significó para el PJ local el empujón final para la postulante kirchnerista, artífice de lograr la unidad partidaria. Sin embargo, no estuvo ajena la polémica por el uso de aviones oficiales y sanitarios de los funcionarios de las diferentes provincias para acudir al convite de campaña en medio de un viñedo cuyano.

Allí, en Luján de Cuyo, Sagasti concluyó de manera oficial su actividad electoral, más allá del debate televisivo final que se realizaba anoche, al cierre de esta edición, donde hubo cruces con Suárez, sobre todo por los problemas de empleo, de seguridad y el desarrollo minero.

Horas antes, Suárez y la candidata del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT), Noelia Barbeito, realizaron sus respectivos cierres de campaña, con actos junto a la militancia. El primero, junto con Cornejo, eligió la comuna de Las Heras, donde también habrá una dura pelea por la intendencia. La segunda, en pleno centro mendocino, en la Plaza Independencia. En tanto, el cuarto postulante, José Luis Ramón, de Protectora, ya había concluido el proceso en el reconocido cine teatro Selectro, aunque no contó con la presencia física del candidato presidencial del espacio, Roberto Lavagna, quien envió un video para demostrar su apoyo al postulante que defiende los derechos de los consumidores.

La noche del miércoles también levantó temperatura en el penúltimo debate televisado por Canal 7 de Mendoza, con cruces finales picantes, donde en el centro de las peleas discursivas estuvo la desocupación y el cuidado del agua. La mayoría de los dardos apuntaron al candidato del oficialismo por la situación económica nacional y por la apertura del gobierno al avance de la industria minera, con el impulso de modificaciones a leyes vigentes. "Hay que dar este debate serio. No es incompatible la minería con el agua, esto pasa en todo el mundo", señaló Suarez, ante el rechazo de los demás candidatos, quienes apuestan más a potenciar la matriz productiva, ganadera, turística y del conocimiento.