Tras una jornada de tensión e incidentes, gendarmes se unen a la protesta de los prefectos

Efectivos de la Prefectura Naval Argentina mantienen hoy una inédita protesta en distintos puntos del país, que tiene su epicentro en el edificio Guardacostas, sede central de la fuerza. Denuncian la aplicación de un decreto que les redujo el sueldo hasta en un 60 por ciento y exigen la restitución de sus haberes.

Por la tarde, los suboficiales mantuvieron una reunión con el viceministro de Seguridad, Sergio Berni, para informarle de su reclamo y pedirle soluciones. La respuesta del funcionario fue un pedido de un plazo de 24 horas para analizar el tema, pero los manifestantes decidieron permanecer frente al edificio, en Puerto Madero, hasta que "se garantice que se les devolverá el dinero y que no habrá sanciones", dijeron.

Sobre el anochecer, tras leer un petitorio de siete puntos, los suboficiales ratificaron que no abandonarán la protesta hasta tener una respuesta oficial, y convocaron públicamente a la Gendarmería a sumarse a la demanda.

Por la noche, el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, se hizo presente en el lugar, donde ya se encontraba el secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa.

Según informó el suboficial Claudio Fabián Mesa, desde las escalinatas del Edificio Guardacostas, el decreto 1307, firmado por Cristina Kirchner y la ministra de Seguridad, Nilda Garré, "no se aplicará". "El decreto queda sin aplicación. Se les va a reintegrar el dinero a quienes cobraron menos. Ahora vamos a elegir un delegado por distrito y mañana a las 14 nos vamos a reunir acá para iniciar la negociación", dijo.

Sin embargo, varios de sus colegas no querían abandonar la protesta hasta tener certezas de las promesas y comenzaron a corear "que bajen, que bajen", exigiendo la firma de un acta que les devuelva el dinero que perdieron.

Más temprano, Mesa había dicho que la protesta no apuntaba contra la ministra de Seguridad Nilda Garré y había reclamado a los funcionarios de esa cartera que defendieran los intereses de los subalternos de la fuerza y permitieran crear una entidad gremial que los represente, según la agencia DyN.

Incidentes

Antes de la llegada de Lorenzino a la sede central de Prefectura en Puerto Madero, hubo corridas, empujones e insultos cuando un grupo de oficiales quisieron salir del edificio. Los agentes en protesta reclamaron por su situación y se generaron algunos pequeños disturbios.

La manifestación se extiende también a otras unidades de la fuerza ubicadas en La Boca, Tigre, Zárate, Núnez y La Plata.

Este mediodía, el secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, llegó al Edificio Guardacostas, ubicado en la avenida Eduardo Madero 235, para negociar con los efectivos. Allí, los prefectos aplaudían y exhibían pancartas en repudio al decreto 1307, publicado el pasado 4 de setiembre en el Boletín Oficial y que originó una reducción salarial "de entre el 30 y el 60 por ciento".

Según revelaron algunos de los uniformados en el edificio del barrio porteño de Puerto Madero, Berni pidió un plazo de 24 horas para buscar una solución del reclamo, pero fue rechazado por los protestantes.

Según denunciaron los agentes, la reducción en los salarios alcanzó valores de hasta 2900 pesos. El Ministerio de Seguridad difundió un comunicado donde reconoció el "descontento en sectores focalizados de la institución" por la aplicación del decreto 1307 y aseguró estar mediando para revertir la situación.

"Las autoridades de Prefectura, junto al Ministerio de Seguridad y de Economía están trabajando para resolver eventuales desequilibrios y encontrar una solución apropiada al tema", concluyó el parte oficial.

Uno de los focos de la protesta se realiza en la "Unidad Cinturón Sur 24", de la calle Pinzón 90, en Capital. Uno de los efectivos allí acuartelados aseguró a la agencia DyN que la medida "es pacífica" y que el personal que se adhirió a la protesta está "desarmado", pero no salía a cumplir servicio esta jornada.

En tanto, otro de los agentes que participaba de la manifestación, identificado como Pedro, explicó en declaraciones a Radio 10 que "cobraba 7000 pesos y ahora está en 4100 pesos".

"Nosotros no estamos autoacuartelados, estamos realizando una protesta para que nos expliquen a qué se debe a la baja de sueldo. Yo con 20 años de antigüedad cobro 4100 pesos, pago 2000 de alquiler, tengo que vivir, viajar y prestar servicio", aseveró el efectivo, que comentó que es suboficial de Prefectura.

En la entrevista radial subrayó que todos los integrantes de la fuerza están "en la misma situación" con respecto a los descuentos salariales.

El pasado 4 de septiembre se publicó en el Boletín Oficial un decreto firmado por la presidenta Cristina Kirchner, por la que se aumentó el salario de los gendarmes y prefectos, pero se eliminó adicionales y compensaciones.

El decretó estableció cuatro nuevos suplementos particulares: "de responsabilidad por cargo", "por función intermedia", "por cumplimiento de tareas específicas de seguridad" y "por mayor exigencia del servicio".

Según el anuncio oficial, el prefecto de menor rango, un marinero, suma 2000 pesos de haberes, mientras que el prefecto general recibe un salario de 7003 pesos.

"Malestar" en Gendarmería

Efectivos de la Gendarmería Nacional reconocieron que en la fuerza también existe "malestar" por la situación generada por la aplicación de un decreto que suprimió adicionales y compensaciones salariales.

Sin embargo, a diferencia de la Prefectura Naval, la Gendarmería no exteriorizó aun ese reclamo.

Según confiaron a DyN desde esa fuerza, el decreto 1307 "fue la gota que rebasó el vaso", aunque en el problema salarial "viene desde hace años". "El problema de fondo es la gran dispersión salarial que existe como consecuencia de los miles de fallos judiciales sueldos mal liquidados que reconocieron a algunos miembros de la fuerza sus reclamos y a otros no", explicaron.

Por esa situación, existen gendarmes que, a mismo rango y antigüedad cobran sueldos distintos. "Un gendarme con fallo firme a favor cobra 6.000 pesos y otro sin haber reclamado a la justicia percibe 3.000", informó integrante de la fuerza.

Al igual que en la Prefectura, los gendarmes sostienen que con la aplicación del decreto 1307 "más del 80 por ciento ve reducidos sus ingresos".