El Gobierno cuestionó a Wercalde por su investigación a Righi

El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak, cuestionó la creación de un equipo especial de fiscales para investigar la conducta del ex procurador Esteban Righi y aseguró que esa medida, dispuesta por el procurador interino Luis González Warcalde, no fue impulsada desde el Ejecutivo.

"El Gobierno en ningún momento sugirió esta medida bajo ningún canal", remarcó el ministro de Justicia, quien recordó, además, que "la Constitución dice claramente que el Ministerio Público es un órgano autónomo, independiente, con lo cual no hay ninguna posibilidad de que el gobierno le dé una directiva".

Alak enfatizó el "desacuerdo" con la decisión tomada por Warcalde, que reemplaz a Righi hasta la designación del nuevo procurador.

Warcalde designó a los fiscales de cámara Germán Moldes, Graciela Sterchele, Eugenia Anzorreguy y Carlos Racedo para trabajar junto al fiscal de la causa que investiga la actuación de Righi, Jorge Di Lello.

"Quiero también manifestar nuestro desacuerdo con la decisión de González Warcalde de darle una amplificación a este proceso penal en su etapa previa a la instrucción al asignar de una manera irracional cuatro fiscales de cámara a un fiscal de primera instancia que no ha solicitado la colaboración de ningún fiscal a la Procuración", afirmó Alak en declaraciones a radio Del Plata.

Además, señaló que el gobierno no tiene "absolutamente nada que ver" con esta medida, a la que tildó de "absolutamente irracional" y atribuyó a "un tema personal que el subprocurador puede tener con el anterior procurador" pero que "no puede usar la administración de Justicia para resolverlo".

La investigación contra Righi se inició por la denuncia pública de Boudou durante su defensa pública por el caso Ciccone, que luego se radicó en la Justicia. En los tribunales recayó por sorteo en el juzgado federal de Ariel Lijo, con la intervención del fiscal Di Lello.

De hecho, recalcó que "la práctica habitual es que, cuando hay un delito importante, se nombran coadyuvantes cuando el fiscal del caso lo pide" y sostuvo que, con su forma de proceder en este caso, "se está afectando la autonomía del fiscal que investiga", en referencia al trabajo de Di Lello.

Fuentes de la Procuración dijeron a LA NACION que la arremetida de su segundo contra Righi no obedecería a directivas del Gobierno, sino que respondería a una vieja interna entre ambos funcionarios.

"Se está cobrando facturas", coincidieron dos fuentes de la Procuración y dos magistrados federales consultados, que recordaron que Righi y su segundo no se llevaban nada bien.