El misterioso secuestro de la familia Gutheim
Cinco meses (de noviembre de 1976 a abril de 1977) estuvieron presos el empresario Federico Gutheim y su hijo Miguel, a disposición del gobierno de Jorge Rafael Videla. Todavía hoy su caso es un misterio: nunca se supo el verdadero motivo de su cautiverio ni qué vínculos tenían con la dictadura los delegados comerciales chinos que viajaron a la Argentina para encontrarse con ellos mientras estaban detenidos.
Hoy, 30 años después, Federico está muerto y su hijo no quiere hablar de lo que pasó. "No queremos revolver. No queremos ni acordarnos. Ayúdennos a olvidar: no nos pregunten más", le rogó ayer a LA NACION Marion, la madre de Miguel.
Con la declaración de nulidad del decreto 2745, ayer se reabrió la causa que investiga si se trató de un secuestro extorsivo y qué responsabilidades les caben por este hecho a Videla y a sus ministros Albano Harguindeguy (Interior) y José Alfredo Martínez de Hoz (Economía).
De acuerdo con la investigación judicial que se cerró con el indulto concedido por Carlos Menem, Martínez de Hoz estuvo en Hong Kong en 1976 y allí se enteró de que un grupo de empresas de ese país estaban molestas por el incumplimiento de un contrato de exportación de algodón que tenían con la firma Sadeco (de propiedad de los Gutheim).
De vuelta en Buenos Aires, el entonces ministro de Economía comentó la situación en una reunión de gabinete.
Pocos días después, el 5 de noviembre de 1976, Federico y Miguel Gutheim fueron detenidos a disposición del Poder Ejecutivo Nacional por medio de un decreto firmado por Videla y por Harguindeguy, que decía que "la actividad de los nombrados atentaba contra la paz interior, la tranquilidad y el orden público y los permanentes intereses de la República".
Traslado
Según el fallo de la Cámara Federal del 14 de julio de 1988 (la última sentencia de la causa, que confirmó las prisiones preventivas de Videla y Harguindeguy y revocó la de Martínez de Hoz), los Gutheim llevaban dos meses presos cuando llegó a Buenos Aires una delegación de comerciantes chinos para reunirse con ellos. Entre el 10 y el 13 de enero, los detenidos fueron trasladados cuatro veces desde la prisión para negociar con sus presuntos acreedores.
Los acompañaron un representante de la Secretaría de Comercio Exterior y un escribano, que labró actas. Según esos documentos, no se llegó a ningún acuerdo y los Gutheim le agradecieron al gobierno militar la posibilidad de llevar a cabo esas negociaciones.
El 6 de abril de 1977, padre e hijo fueron liberados.
Federico Gutheim murió en 1995 y entonces su fábrica algodonera, que limpiaba desperdicios de algodón, se transformó en un depósito que se subalquila a otras pymes. Quedó en manos de Miguel, que hoy es representante de textiles brasileñas en la Argentina.
Más leídas de Política
Por los dichos de un ministro. España reaccionó al comunicado de Casa Rosada que habla de “calumnias”, “injurias” y de la esposa de Sánchez
Acusó a Milei de ingerir “sustancias”. Francos renovó las críticas a España por la frase del ministro y dijo que Sánchez debería pedir su renuncia
La intimidad del gabinete. Javier Milei en un impensado papel de pacificador