AMIA: la fiscalía acusó a Carlos Telleldín de vender la Trafic a sabiendas de que iba ser usada en un delito grave

La fiscalía que actúa en el segundo juicio oral por el atentado a la AMIA aseguró que Carlos Telleldín se representó que la camioneta Trafic que vendió de forma ilegal días antes del ataque terrorista contra la mutual judía iba a ser usada para cometer un delito grave, y que eso "no le importó".

"Se lo representó como probable y no le importó", sostuvo el fiscal Roberto Salum ante el Tribunal Oral Federal 3, en el alegato final que seguirá el próximo miércoles con el pedido de pena.

El modo en que está encuadrando el caso la fiscalía hace suponer que pedirá que Telleldín sea condenado por el delito de estrago culposo, lo que podría reducir el pedido de pena a 20 años de cárcel en lugar de prisión perpetua, que es la pena máxima para el homicidio agravado.

La fiscalía que actúa en el juicio inició el alegato por videoconferencia y anticipó que pedirá condena a Telleldín. "Falta a la verdad cuando dice que nunca supo para qué sería usada. Eso es falso", sostuvo Salum.

Sin embargo, al igual que la querella de la AMIA-DAIA no consideró probado que el exreducidor de autos y actual abogado haya sido parte del grupo terrorista que voló la AMIA y causó 85 muertos el 18 de julio de 1994.

La querella por las instituciones que tenían sede en Pasteur 633 pidió ya 20 años de condena a Telleldín, mientras que los familiares de las víctimas solicitaron prisión perpetua.

Apenas cometido el atentado, a las 9.53 del 18 de julio de 1994, Telleldín "ya sabía que había sido usada su Trafic porque al momento de concretar la operación ilícita de venta se lo había representado y al instante de cometido el atentado supo definitivamente que la Trafic que se usó fue la que él entregó", argumentó la fiscalía.

Los fiscales Salum y Sergio Eyherabide recordaron que Telleldín se dedicaba en esa época al negocio ilícito de compraventa de autos robados, mediante el doblaje, y por eso tenía herramientas para darse cuenta de que la operación de venta de la Trafic usada en AMIA no había sido "normal", como la quiso presentar.

"Fueron a verlo tres extranjeros y un día después otro, casi disfrazado, con una valija llena de dólares. No revisaron el vehículo, no pidieron papeles", enumeraron.

Además, aludieron al pasado de Telleldín como parte del área de inteligencia de la policía cordobesa en la dictadura militar, entre 1977 y 1981.

"Solo basta recordar que esa dependencia fue tristemente célebre en la represión ilegal en la dictadura, sus integrantes se destacaban por la saña contra los secuestrados en la tortura", dijo Salum.

Todo esto "le daba a Telleldín herramientas poderosas y sofisticadas para identificar lo obvio, que la finalidad de la obtención de la Trafic podía ser para un hecho terrorista y no le importó". Además, estaba presente en la memoria el antecedente del atentado a la Embajada de Israel, ocurrido dos años antes, mencionó Eyherabide.